El enemigo será derrotado: las armas del guerrero eslavo. Espada eslava: tipos y descripción.

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Continúo la sección "Espadas: símbolos de la época" sobre espadas reconocibles a primera vista.

No se pueden contar las invenciones ociosas y los "descubrimientos" locales sobre las espadas "rusas" o "eslavas", que se portan como un perro depredador de lobos, desde el extremo "los eslavos no tenían espadas hasta el siglo IX". ” al extremo “las espadas de los eslavos son los antepasados ​​​​de cualquier espada en el planeta Tierra”. Por supuesto, la verdad en el medio no es tan brillante, ya que se nos revela a través de la hazaña infernal de arqueólogos heroicos, el trabajo minucioso de los restauradores y los esfuerzos verdaderamente titánicos de los historiadores profesionales. De alguna manera, cuentan con la ayuda de recreadores y coleccionistas, que inmediatamente reproducen cuidadosamente muestras interesantes, muchas de ellas con detalles asombrosos y que permiten al público presentar no restos oxidados, sino un producto sólido, colorido y brillante que fácilmente golpea a los negacionistas más apasionados de la realidad en el mundo. cabeza.

Antes de pasar directamente a las espadas, es necesario comprender un poco sobre la vida y el modo de vida de la sociedad eslava y, en general, de cualquier habitante de Europa en ese momento, ya que los eslavos estaban, como lo están ahora, firmemente integrados en el mundo. economía, religión y asuntos militares. No tiene sentido abordar esos eventos, acciones y acciones desde posiciones y conceptos modernos, especialmente con juicios de valor modernos, porque si eres capturado y no rescatado, te pones al servicio del enemigo. Además, mañana serás hecho prisionero por tus propios antiguos compañeros y, al no ser redimido por el anterior propietario, volverás a incorporarte al servicio. Al mismo tiempo, esto no es una traición de ningún tipo, una práctica normal, y un guerrero ni siquiera pensará en culparse por algo, esto está en el orden de las cosas, sobre todo porque los enemigos no son fascistas, sino los mismos. príncipe de un pueblo vecino, tiene en su escuadrón a la mitad de tus familiares y conocidos. Nadie matará tampoco: un experto profesional (a quien a menudo se le llama justiciero), una valiosa reserva de mano de obra, será útil.

Las pérdidas de combate de las tropas de esa época fueron mínimas, fue más como una demostración de fuerza y ​​​​escaramuzas extremadamente raras, una batalla de proporciones grandiosas: la batalla de Kulikovo, donde participaron un par de decenas de miles de personas en ambos lados. Además, se trata de batallas de un período muy posterior, Batalla en el hielo En una escaramuza de apenas unos pocos miles de jinetes, la gran batalla de Hastings, que decidió el destino de Inglaterra en 1066, apenas contó con decenas de miles en todos los bandos. Hubo pérdidas irrecuperables en combate de miles de personas, por lo que fueron incluidas en las crónicas, y la guerra característica, mencionada de pasada, solía tener pérdidas de decenas de personas. La mayoría de las pérdidas se debieron a enfermedades como la disentería o el envenenamiento banal de la sangre, sobre las cuales, como ve, nadie escribirá en las crónicas. En Kiev, Súzdal o Nóvgorod rara vez se podían reunir más de 1.000 personas, ya que en la época descrita sólo se enviaban a la guerra guerreros profesionales que nunca se dedicaban a la agricultura, sólo jinetes y ninguna milicia. En ese momento, el ejército desplegado por Rusia era de 3000 a 4000 personas. para cualquier país europeo, por supuesto, un ejército grandioso, ya que se establecieron en 2-3 hogares en granjas muy dispersas de 10 a 15 personas. y para los agricultores un ejército así era generalmente incomprensible, ya que cualquier número superior a tres era “muchos”; no todos sabían contar hasta una docena, ni siquiera en el siglo XIX. En Novgorod vivían unas 30.000 personas, en Kiev entre 40.000 y 50.000 personas, eran megaciudades gigantescas.

Las economías campesina y militar son fundamentalmente diferentes durante las excavaciones: la economía militar no tiene implementos agrícolas, mientras que la economía campesina no tiene espada, ni siquiera un sulitsa (dardo) o un arco. Por tanto, la espada eslava es un arma profesional, extremadamente rica y cara, al igual que las armaduras, por ejemplo, los cascos eslavos, una obra. arte de la joyería, y por lo tanto raro. Si en algún momento todos los principados de Rusia tenían 10.000 espadas en sus arsenales, esto es simplemente una cantidad increíble para la Europa de esa época, aproximadamente lo mismo que 10.000 de los tanques más modernos de ahora. Las espadas eslavas están incluidas en las armas paneuropeas, al igual que nuestras armas ahora, en algunos aspectos similares, en algunos aspectos diferentes. Quería presentar las espadas de vikingos y eslavos juntas, pero hay mucho material y el tema es apremiante, además, en general, difieren significativamente en varios aspectos y es mejor separarlas. Continúo con los discursos permitidos, en nombre de Kirpichnikov, Peter Lyon y Oakeshott, akinak.

Desde la antigüedad, la espada ha sido un arma privilegiada en Rusia y quienes la llevaban, por regla general, tenían un alto estatus social.

La espada constaba de una tira ancha, afilada por ambos lados, es decir, una hoja y un mango, cuyas partes se llamaban: manzana (algunos insisten en el pomo), negra y pedernal. Cada lado plano de la hoja se llamaba "golomen" o "golomya", y las puntas se llamaban "cuchillas". En el holomen se hicieron uno ancho o varios huecos estrechos llamados dol. Las hojas eran de acero o hierro, la espada se colocaba en una funda tapizada en cuero o, posteriormente, en terciopelo. La vaina estaba hecha de hierro, madera, cuero y, a veces, estaba decorada con muescas de oro o plata. La espada se colgaba del cinturón mediante dos anillas situadas en la boca de la vaina.

Por tipología, las espadas eslavas son paneuropeas, características del Imperio carolingio o, como se llamaban a sí mismos, el Imperio Occidental, formado por Alemania, Francia e Italia, es decir, la Unión Europea 2.0, también conocida como los francos. Es lógico que la formación, cuyo gobernante se hacía llamar Emperador de los romanos, adoptó la spatha, popular en Roma, así como sus prototipos de la Península Ibérica, populares en Europa continental, y la mejoró en todos los sentidos de acuerdo con métodos tácticos de batalla actuales. El término espada carolingia, o espada de tipo carolingio (también conocida como “espada vikinga”) fue introducido por expertos y coleccionistas de armas de los siglos XIX y XX.

Spatha romana, merovingia y spatha germánica



El tipo de espada carolingia se desarrolló alrededor del siglo VIII, al final de la era de la Gran Migración de Pueblos y al comienzo de la unificación de los estados de Europa Occidental bajo los auspicios de Carlomagno y sus descendientes, lo que explica el nombre. del tipo de espada (“pertenece a la época carolingia”). La espada de tipo carolingio es un desarrollo de la antigua spatha a través de un eslabón intermedio: una espada de tipo Wendel, también conocida como espada "merovingia" o espada del período de la Gran Migración. Los carolingios tenían una hoja de doble filo de unos 90 cm de largo con un filo profundo, un mango corto con una guarda pequeña y un peso total de aproximadamente 1 kg.

En el siglo X, la espada de tipo carolingio estaba muy extendida en los países del norte y oeste de Europa, especialmente en las regiones franco-celta, escandinava y eslava. Esto se debe al hecho de que en Alemania trabajaba la enorme corporación armamentista Ulfberht, cuyas espadas simplemente están salpicadas de los países escandinavos y las tierras eslavas, había otras espadas de firmas masivas, es decir, también trabajaban otras corporaciones.

En particular, hay un hallazgo que se consideró escandinavo, pero al extraer una espada de Foshchevataya, se reveló la inscripción LYUDOTA o LYUDOSHA KOVAL, que, a pesar de la decoración ornamental escandinava, indica claramente que en Rusia había al menos dos brazos grandes. corporaciones que tenían la capacidad de forjar espadas carolingias y aplicarlas. Hay inscripciones bastante intrincadas y complejas utilizando tecnología compleja. La segunda espada tiene la inscripción SLAV, su estado de conservación es mucho peor. A juzgar por la abundancia de producción de espadas no identificadas, podemos decir que al menos grandes producciones se produjeron en Ladoga, Novgorod, Suzdal, Pskov, Smolensk y Kiev. El hecho de que tales inscripciones son una marca registrada, y no una marca del maestro, lo demuestran los hallazgos francos de diferentes siglos; las inscripciones cambian debido al cambio de marca, la escritura es diferente. Sí, la mayoría de las espadas encontradas en Rusia son claramente de origen alemán, sin embargo, los propios escandinavos compraron activamente espadas francas en grandes cantidades y las reexportaron a Rusia. El hecho de que los escandinavos revendieran las espadas se evidencia en el hecho de que en Rusia sólo se encontró una hoja sajona de un solo filo, una hoja que se sabe con certeza fue forjada por los escandinavos. Algunas de las hojas sin firmar tienen marcas simples de maestros, también de origen franco, mientras que aproximadamente una décima parte no tiene ninguna marca.


Además, no se debe descartar la exportación de espadas eslavas, al menos esto lo indica claramente tanto la completa similitud de las espadas emblemáticas de producción franca como la composición de las aleaciones eslavas, así como los hallazgos de tales espadas del tipo A en Suecia y Lituania. También hay evidencia de al-Kindi en el tratado “Sobre varios tipos espadas y hierro de buenas hojas y sobre las localidades por las que se llaman” e Ibn Rust sobre “Suliman”, es decir, las espadas de la Rus. Señalan la riqueza de la decoración de las espadas rusas, la similitud general con las espadas francas y la ausencia de marcas (que, por cierto, es típica de las espadas rusas posteriores). Ibn Fadlan también menciona constantemente las magníficas espadas rusas que enviaban a los mercados orientales, donde había hojas de mala calidad. Ibn Miskaweikh recuerda las espadas rusas principalmente en los informes sobre cómo los musulmanes robaron tumbas rusas y a los soldados caídos, destacando la excelente calidad de las espadas "como las de los francos", al igual que las bizantinas y las armenias.

La espada rusa antigua es un arma cortante: "que no se defiendan con sus escudos, y que sus espadas los corten" o "que corten sin piedad con una espada". Pero algunas expresiones de la crónica, aunque posteriores, sugieren que en ocasiones la espada se utilizaba para apuñalar a un enemigo: “los que llamen al fin serán traspasados ​​por una espada”. La longitud habitual de una espada del siglo X era de unos 80 - 90 cm, pero se encontró una espada simplemente gigantesca, de 1,2 m de longitud, de un peso monstruoso, ni siquiera está claro a qué héroe podría haber pertenecido (incluso la espada de Pedro 1, que medía 2,03 cm, tenía una espada notablemente más pequeña). El ancho de la hoja era de 5 a 6 cm y el espesor de 4 mm. A lo largo de la hoja, en ambos lados de la hoja de todas las espadas rusas antiguas, hay batanes, que servían para aligerar el peso de la hoja. La punta de la espada, que no estaba diseñada para un golpe penetrante, tenía una punta bastante roma y, a veces, incluso era simplemente redondeada. El pomo, la empuñadura y la cruz de la espada casi siempre estaban decorados con bronce, plata e incluso oro; las hojas, como las del túmulo funerario de Gnezdovo, estaban simplemente increíblemente ricamente decoradas. En general, una característica distintiva de las espadas eslavas, además de la forma del pomo y los adornos, puede considerarse el lujo del acabado.

Nos interesa el tipo A claramente diferente (abajo). Los tipos de espadas se dividían convencionalmente según el pomo y el tipo de decoración, pero también hay híbridos, en particular, muchos adornos de animales escandinavos se convirtieron en adornos vegetales eslavos, por ejemplo en la vaina, por lo que claramente hubo una influencia opuesta, no solo se exportaron. espadas traídas en cantidades comerciales a Rusia. Se habla mucho de la posibilidad misma de fabricar no "simples productos metálicos", sino espadas, pero la cuestión se cierra torpemente con las espadas de firma eslavas, incluso con un pomo escandinavo, que generalmente es removible y tal vez al propietario le gustaron las extranjeras. , entonces no es como aquí. El tipo A se diferencia claramente de todas las espadas europeas habituales y sólo se encuentra aquí, lo que sugiere una producción local.


Las hojas de las espadas se volvieron complejas debido a la baja calidad del acero y el alto costo del hierro. La parte central (base) de la hoja estaba hecha de hierro dulce, las hojas eran de acero endurecido, luego se soldaban a la base, lo que, a pesar de la laboriosidad del proceso, permitió que la hoja fuera flexible y duradera. al mismo tiempo. Esto se debe a las propiedades del acero, hay acero cementita, hay acero perlita, el primero es duro y quebradizo como el vidrio, el segundo es dúctil y blando. Los llamados Damasco (los famosos y hermosos sables de Damsas) no se podían usar en Rusia debido a que el acero allí es cementita, lo que significa que teme a las heladas y se rompe en fragmentos al impactar. Esto se evita creando acero de perlita-cementita, donde los granos de cementita se recubren con perlita y se obtiene una hoja que se puede utilizar en lugar de una hoja en el frío, pero estas son tecnologías modernas, cuando todo el mundo llora por el secreto perdido de “ Damasco”, y simplemente nadie lo necesita porque el acero es de mayor calidad. Ahora, por cierto, si haces una espada, puedes hacer una hoja que ninguna hoja famosa de la antigüedad pueda siquiera compararse con ella. Había hojas cementadas en Rus, pero era un poco y en general difícil soportar la temperatura sin un termómetro según el color del metal, 10K de ida y vuelta y la espada desapareció.



La técnica de Damasco es compleja: se toman placas de hierro o acero, las tuercen, las forjan muchas veces, las cortan, las forjan (hay muchas opciones) y luego, con posterior grabado al ácido, el querido patrón “damasquinado”. es obtenido. De hecho, esto no dice nada sobre la calidad de la espada, pero el consumidor se regocija sin darse cuenta de que se trata de una medida necesaria y no de acrobacias aéreas. Luego soldaron hojas de acero a la base, luego aprendieron a dejar un poco de hierro en la base, cubriéndola con acero, y luego llegaron a una hoja sólida. Y luego comenzaron las falsificaciones: simplemente se metió acero fino "Damasco" encima de un núcleo de hierro, y así apareció un Damasco falso, que afortunadamente no llegó a China.

Espada Gnezdovo, réplica


Existen las leyendas habituales sobre probar espadas, que cuando te las pones en la cabeza hay que doblarlas hasta los hombros y se enderezará sin consecuencias, pero al parecer son inventadas por personas que nunca han hecho esto, les duele la cabeza. , es mejor comer con él. Un hombre fuerte puede doblar la espada con bastante libertad hasta formar un anillo con las manos, por ejemplo cuando muestran los restos de Ilya Muromets en Kiev; bueno, era un hombre de estatura extremadamente promedio, pero probablemente podría ceñirse con su espada, como lo hacían en Oriente. Cortar clavos y una bufanda de gas también genera dudas, ya que las uñas eran caras, nadie quería estropear la espada, y el afilado claramente no era muy afilado y la bufanda simplemente colgaría de la hoja como de un palo. Quizás algunos fantásticos sables de Damasco podrían realizar tal truco, pero desde entonces nadie lo ha mostrado, aparentemente ya sea un cuento de hadas o una sola copia, junto con un hábil truco. Lo mismo se aplica a las delirantes historias sobre endurecer una espada en sangre, perforar el corazón del enemigo con una pieza de trabajo al rojo vivo y probar la espada para ver cuántas cabezas arranca a la vez, ya que todos estos procedimientos son perjudiciales a la hora de endurecer y templar. ; requiere aceite o, en el peor de los casos, agua. Como regla general, no escribo sobre sables y cuchillos largos de los sajones, incluidos los eslavos, pero se usaban junto con las espadas.

Las espadas se encuentran principalmente en túmulos, menos a menudo en tumbas; cuanto más cerca de las ciudades antiguas, más probable es encontrar una espada en medio centenar de tumbas, mientras que en el campo de aquella época apenas había una espada en un cuarto de siglo. mil tumbas. No cada diez montículos no saqueados contienen espadas; los raros entierros de caballos no deberían sugerir que las personas más ricas, con ropas lujosas, con un kilogramo de joyas de oro, con una espada, una lanza y un hacha dispuestas según la antigüedad, fueran barrenderos a pie. Una espada, como un caballo, eran signos de estatus, por lo que sería extraño ver a un boyardo noble, pero sin un buen caballo castrado. Hallazgos de espadas eslavas anteriores al siglo IX. No hablan de su ausencia, solo que antes la espada no estaba personificada por una persona y se transmitía por herencia, siendo un arma increíblemente valiosa, además, en el siglo IX. la escala de producción llegó a ser tal que algunas de las armas podían sacrificarse en honor de guerreros honorables para que las espadas no fueran robadas y dobladas deliberadamente.


Las espadas se llevaban en fundas, se podían cubrir con cuero o terciopelo; los artesanos rusos incluso utilizaban piel de pescado en artículos caros. Se llevaban en un cinturón o en un cabestrillo, no hay ninguna mención ni información fiable sobre su uso detrás de la espalda, y desde la ergonomía no queda claro cómo conseguirlo detrás de la espalda. Las vainas estaban ricamente decoradas, como se desprende de las puntas conservadas, a menudo hechas de metales preciosos; las vainas en sí, naturalmente, no llegaron hasta nosotros.


Además, las espadas carolingias coexistieron con espadas eslavas de tipo románico hasta el siglo XIII, desapareciendo gradualmente de la circulación. Están siendo sustituidas por espadas románicas, que, en mi opinión personal, son mucho más cómodas, sobre todo para el combate a caballo (más fáciles, caben en la mano y el pomo no estorba, se pueden rematar en la muñeca) y no sin las ventajas de la espada carolingia, pero esa es una historia completamente diferente.

No es casualidad que nuestra historia sobre las armas de contacto de los antiguos eslavos comience con esta magnífica arma. La espada es la principal arma ofensiva del guerrero-combatiente ruso, un símbolo del poder principesco y el emblema militar de la antigua Rusia. Los guerreros de Igor juraron por la espada y concluyeron un acuerdo con los griegos en 944: “Y los rusos no bautizados, depongamos nuestros escudos y espadas desnudas” (y los rusos no bautizados depongamos sus escudos y espadas desnudas). un arma sagrada. Fue tratado como una persona, considerado animado. Las espadas únicas llevaban nombres (recuerde la espada del Rey Arturo - Excalibur, o más precisamente - Kaledvuh: Excalibur es una corrupción del nombre "Caliburn", que es una corrupción de "Kaledvukh", y estos nombres también eran hechizos mágicos. En Escandinavia, las espadas A menudo llevaban nombres como "La llama de Odín", "El perro de los cascos", "El fuego de los escudos"; estos nombres fueron escritos por los antiguos artesanos en el tercio superior de la hoja. No hay duda de que Rusia no era inferior en esto a sus vecinos del noroeste: por ejemplo, cerca de Brest, se encontró una punta de lanza en la que la hoja de acero tiene incrustaciones de plata con signos sagrados: una esvástica y símbolos solares y la inscripción rúnica "Tilariths" - "Atacante" (Runica es el nombre común (de la antigua escritura escandinava y eslava antigua: el nombre era el mismo, pero las filas de símbolos eran diferentes). Juraron con espadas en disputas importantes, se les habló, como lo describe la balada danesa "La espada vengadora":

Todas las propiedades mágicas de un material relativamente nuevo para la humanidad, el metal, se transfirieron por completo a la espada. Al producir una espada, el herrero acompañaba el trabajo con hechizos y rituales mágicos. Cuando el herrero trabajaba, se comparaba con el Dios Creador Svarog y se sentía partícipe de la creación del mundo. Está claro que la espada, nacida en manos del herrero, tenía enormes propiedades mágicas. Surgió una fuerte conexión mágica entre la espada y el dueño. Era imposible decir exactamente quién era el dueño de quién. También vale la pena mencionar que en muchos idiomas la palabra "espada" es femenina, hay nombres de espadas femeninas (por ejemplo, la espada del caballero Roland se llamaba "Joyez" - "Alegre"), por lo que la espada podría parecerse a verdadero amigo, y un querido amigo... No siempre se compraba una espada en el mercado: las mejores espadas no las compraban sólo por un puñado de oro, no todas las personas. Estas espadas eligen a su dueño: para tomar posesión de ellas, el héroe debe realizar una hazaña: tomar la espada en la batalla. Un ejemplo sorprendente es la conocida Espada del Tesoro, escondida bajo una piedra pesada: no todo el mundo podrá tirar esta piedra y conseguir un arma magnífica. Los eslavos también utilizaron las espadas para resolver disputas complejas: se utilizaron en duelos y en los tribunales.

Vale la pena decir algunas palabras sobre el uso de la espada en la batalla. La espada nació como un arma puramente ofensiva: los guerreros usaban sus espadas para abrirse camino hacia la meta. Y ojo: la cortaron, porque la espada era originalmente anterior al siglo XI. - un arma puramente cortante. A menudo, incluso la punta de la espada se redondeaba. Lo apuñalaban como una espada en situaciones de emergencia: ya sea cuando un guerrero alcanzaba un estado de pasión (se convertía en un “berserker”) o cuando apuñalar a un enemigo era la única forma de herirlo (como, por ejemplo, un caballero cruzado protegido). por una concha). En general, la espada, desarrollada como un arma puramente ofensiva, no implicaba funciones defensivas, por lo que al principio ni siquiera tenía un "pedernal", una mira en el mango: los golpes no se detenían con la espada. En vista de esto, en los siglos VII-X la espada desarrolló esta misma mira, o como se llamaba en Rusia, "pedernal", y un escudo acompaña inextricablemente a la espada. La espada rusa antigua es un arma cortante: "no se defiendan con sus escudos, y sean cortados con sus espadas" (no se defenderán con sus escudos y serán cortados con espadas) o "cortarán con una espada". sin piedad." Pero algunas expresiones de la crónica, aunque posteriores, sugieren que la espada se utilizaba en ocasiones para apuñalar: “aquellos que llamen al fin serán traspasados ​​por una espada”. La longitud habitual de una espada en el siglo X. era de aproximadamente 80-90 cm, el ancho de la hoja era de 5-6 cm y el espesor de 4 mm. A lo largo de la hoja, en ambos lados de la hoja de todas las espadas rusas antiguas, hay batanes, que servían para aligerar el peso de la hoja. La punta de la espada, que no estaba diseñada para un golpe penetrante, tenía una punta bastante roma y, a veces, incluso era simplemente redondeada. El pomo, la empuñadura y la mira de la espada casi siempre estaban decorados con bronce, plata e incluso oro.

La espada era un arma, en primer lugar, de valientes guerreros, boyardos y príncipes: no todos los guerreros poseían una espada: además del precio más alto, la técnica de empuñar una espada es muy compleja y no a todos les resultó fácil.

La espada es el arma principal del guerrero-combatiente ruso, un símbolo del poder principesco y el emblema militar de la antigua Rus. Los guerreros de Igor juraron por la espada y concluyeron un acuerdo con los griegos en 944: “Y los rusos no bautizados, que depongan sus escudos y espadas desnudas” (y los rusos no bautizados depongan sus escudos y espadas desnudas). Crónicas rusas y Otras fuentes escritas están repletas de referencias a la espada. Las espadas no están menos representadas en el material arqueológico. La mayor parte de las espadas, como otras armas, nos llegaron desde el siglo X. Los entierros de los guerreros Igor, Svyatoslav y Vladimir Svyatoslavovich estuvieron acompañados de un rico conjunto de armas y diversos equipos militares.

Muchas clases se dividen en subclases de espadas, pero el criterio principal para el tamaño y la estructura de una espada medieval temprana es su empuñadura: luego estaban las de una mano (las más cortas), las de una mano y media, que un hombre fuerte lo sostenía con una mano, pero nadie le prohibía tomarlo con las dos manos y al Bogatyr con espadas a dos manos. Dependiendo del entorno, las espadas se hicieron más cortas y más largas de siglo en siglo. En los siglos XI-XII, debido a que las batallas se libraban en formación cerrada, las espadas se acortaron a una media de 86 cm y se volvieron más ligeras, menos de 1 kg, pero en los siglos XII-XIII, debido al fortalecimiento de armadura, la espada se hizo más masiva: la hoja se extiende hasta 120 cm y pesa hasta 2 kg.

El famoso científico ruso D.N. Anuchin escribió: "De todos los tipos de armas, la espada, como arma ofensiva, ciertamente jugó el papel más importante en la antigüedad. Era el arma privilegiada de un guerrero libre, la más cara, la que fue el más valorado por él y, en esencia, fue el que decidió el resultado de la batalla". Habiendo recorrido un largo camino de evolución, la espada entre los siglos IX y XIII. V Rus de Kiev, estaba muy extendido, aunque era demasiado caro para los ciudadanos y campesinos corrientes y, por tanto, inaccesible.

Espadas siglos IX - X. en la literatura sobre ciencia de las armas se les suele llamar carolingios, siglos XI - XIII. - Románico o Capeto. Muestras de espadas de tipos europeos llegaron a Rusia con los varegos; en aquellos días, la difusión de tal o cual arma entre los señores feudales europeos fue inusualmente rápida. Rusia usaba espadas de casi todos los tipos entonces conocidos en Europa, y en esto no era inferior a las principales. países europeos. Al mismo tiempo, ya en el siglo X. Las espadas orientales, comunes desde el siglo VII, eran muy conocidas en Rusia. entre los árabes y persas no menos que los carolingios similares en forma en Europa occidental.

Sin embargo, ya en el siglo X. Los rusos estaban familiarizados con el acero de damasco y fabricaban sus propias espadas. Muchos autores musulmanes describieron las espadas de la Rus, llamándolas armas terribles. Argumentaron que los rusos llevan constantemente espadas consigo, las ven como un medio de vida, luchan con ellas en los tribunales y las llevan a los bazares orientales. Ibn Dasta escribió: “Si a uno de ellos le nace un hijo, toma una espada desnuda, la coloca frente al recién nacido y dice: “No te dejaré ninguna propiedad como herencia, pero solo tendrás lo que obtendrás para ti con esta espada”.

Los antiguos cronistas rusos a menudo representaban espadas en miniaturas. Hay un patrón: cuanto más antiguos son los acontecimientos representados, más a menudo se representan espadas. En el territorio de la Rus de Kiev se encontraron más de 100 espadas carolingias y 75 espadas románicas. En comparación con otros tipos de armas, la espada no es el hallazgo más común en los entierros.

Intentaron conservar las armas de príncipes y héroes famosos y las consideraron un símbolo de invencibilidad. Se rodearon con especial respeto las armas conmemorativas, como las espadas de los príncipes de Pskov, Vsevolod y Dovmont, guardadas en la Catedral de la Trinidad, o la espada del príncipe Boris, que colgaba en el dormitorio de Andrei Bogolyubsky y luego se guardó en una de las iglesias. de Vladimir. La espada de Dovmont tiene una longitud de 120 cm y un peso de 2 kg y está diseñada más para perforar armaduras pesadas que para cortar.

Estructuralmente, la espada constaba de una hoja ancha, de doble filo, bastante pesada y un mango corto (mango, mango). Las partes del mango se llamaban manzana, negro y pedernal (guardia o arco kryzh). Cada lado plano de la tira se llamaba golomen o golomlya, y la punta se llamaba cuchilla. Los holomen casi siempre se hacían con uno ancho o varios huecos ranurados estrechos. El primero se llamaba dol, y el resto valles. En el lenguaje común, los valles de las armas blancas a menudo se llamaban "surcos para la hinchazón de la sangre", "chorros de sangre". Sin embargo, eso no es verdad. Su aparición supuso un gran paso adelante en la tecnología de las palas; redujeron el peso de la pala. Gracias al fuller, la tira se podía extender aún más sin sobrecargar la mano con exceso de peso. A veces, el muñeco era decorativo. La punta de la espada, que no estaba diseñada para dar una estocada, solía ser roma y, a veces, incluso simplemente redondeada. Posteriormente, cuando la espada también adquirió una función perforadora, se afiló su filo.

La fabricación de espadas era una de las ramas más complejas de la metalurgia. Cada operación de preparar el metal, estirar la tira, pulir, endurecer, afilar, colocar el mango y hacer la funda era realizada por una persona distinta. La hoja pasaba secuencialmente del herrero-soldador, quien forjaba la tira de la espada, al endurecedor, luego a la rectificadora, de allí regresaba al endurecedor para volver a endurecerlo y templarlo, luego pasaba al pulidor y finalmente pasaba a el ensamblador, que hizo el mango y el juego. Los vaineros y joyeros que decoraban la espada trabajaban por separado, asociados al ensamblador.

Espadas de diferentes diseños y diversas tecnologías hablan de diferentes escuelas y etapas de desarrollo de la fabricación de espadas en la Rus de Kiev y en Europa en general.

Estudiamos la tecnología para la producción de hojas de espada a partir del análisis metalográfico de 12 ejemplares de espadas. Cinco espadas provienen de los túmulos funerarios de Gnezdovo, cuatro espadas de los túmulos funerarios de Mikhailovsky, dos espadas de los túmulos funerarios de Ladoga y una espada de Vshchizh (una antigua ciudad rusa en el río Desna en la región de Bryansk). Basándonos en los diagramas estructurales descubiertos del metal de las antiguas espadas rusas, estamos reconstruyendo la tecnología de su fabricación.

Si crees que una espada es sólo un trozo de hierro áspero y afilado, estás profundamente equivocado. En aquella época existían diversos métodos para soldar hierro y acero de tal forma que el producto final tenía propiedades realmente sorprendentes. Por supuesto, lo más sencillo era hacer una espada totalmente metálica, pero ésta sólo era adecuada para los campesinos y para el entrenamiento en la guerra. El siguiente nivel eran espadas soldadas de 2 a 6 tiras de hierro y acero: se soldaba una hoja de acero a una pieza de hierro. Una espada así ya era adecuada para un joven guerrero o para un campesino en servicio militar.

Sin embargo, el verdadero marido militar tenía una espada completamente diferente. Todo el mundo conoce la palabra acero de damasco. ¿Lo que es? Esta palabra proviene del antiguo reino de Puluadi (el territorio de las actuales Turquía, Armenia, Georgia e Irán), donde se fabricaba el mejor acero del mundo en aquella época.

De aquí provienen la palabra persa “puluad” y la palabra árabe “Al fulad”, acero, que en Rusia se convirtió en acero de damasco. En general, el acero es una aleación de hierro con otros elementos, principalmente carbono. Pero el acero de damasco no es sólo acero: las espadas de acero de damasco fueron capaces de cortar hierro y acero durante muchos años, prácticamente sin desafilarse, sin doblarse, pero también sin romperse. Todo se explica por el contenido heterogéneo del uno por ciento de carbono en el acero de damasco. Los antiguos herreros lo conseguían enfriando hierro fundido con grafito, una fuente natural de carbono. La hoja, forjada a partir del metal resultante, fue grabada y en su superficie aparecieron patrones característicos: rayas oscuras onduladas y retorcidas sobre un fondo más claro. Este fondo resultó ser gris oscuro, dorado o marrón rojizo, negro. El acero de damasco negro se consideraba más frágil; los guerreros experimentados preferían el tono dorado de la hoja.

Bulat también varió en calidad. Se distinguió por el tipo de patrón. Un patrón grande es un signo de buena calidad, con franjas de 10 a 12 mm, el acero damasco con un patrón de 4 a 6 mm se consideraba promedio. y muy simple era el acero damasco con un patrón delgado con un grosor de línea de 1-2 mm.

La base de la hoja de la espada estaba hecha de hierro o soldada con tres tiras de acero y hierro. Cuando la base de la hoja se soldó solo de acero, se tomó metal con bajo contenido de carbono.

También se utilizó el cementado de la superficie de una espada totalmente de hierro. La espada de los Montículos Mikhailovsky tenía una tecnología similar.

Tenemos ante nosotros la tecnología rusa antigua más típica para fabricar un producto de alta calidad: soldar una base suave y viscosa con una hoja de acero y el posterior tratamiento térmico de toda la hoja.

si comparamos esquemas tecnológicos producción de hojas de espada y, por ejemplo, guadañas, encontrará mucho en común: la misma soldadura multicapa o soldadura de una hoja de acero, torneado más completo y tratamiento térmico, lo mismo distancia larga y el pequeño espesor de la hoja de la espada y de la hoja de la guadaña. La única diferencia es que la guadaña tenía una hoja y la espada dos.

Muy información interesante su contemporáneo, el científico khorezmiano Al-Biruni, mencionado anteriormente, informa sobre la técnica de producción de espadas por parte de los antiguos herreros rusos. "Los rus hicieron sus espadas de shapurkan, y los batanes en el medio de narmokhan, para darles fuerza cuando se golpean, para evitar su fragilidad. Al-fulad (acero) no tolera el frío de sus inviernos y se rompe cuando se golpea ... Cuando conocieron el farand (es decir, con acero de damasco estampado.-Pierna), inventaron el tejido para los bataneros con alambres largos (hechos) de ambos tipos de hierro: shapurkan y femenino (es decir, hierro). producen tejidos soldados al sumergir (en grabado) cosas asombrosas y raras, tal como deseaban y pretendían recibir. Al-farand (dibujo) no resulta según la intención al hacer (la espada) y no viene a voluntad, pero es accidental."

Este texto es interesante en dos niveles. En primer lugar, confirma las conclusiones sobre la tecnología de producción de hojas de espada que hicimos basándonos en el estudio de sólo 12 espadas. La tecnología de soldar hojas de acero (“de shapurkan”) sobre una base de hoja de hierro (“de normokhan”) es totalmente rusa. En segundo lugar, Al-Biruni habla de la superioridad de la técnica de hacer patrones en las hojas de las espadas entre los armeros rusos. Con la combinación adecuada de tiras de hierro y acero en la base de la hoja, el antiguo herrero ruso podía obtener cualquier patrón con el mismo ritmo en toda la tira, lo que sorprendió especialmente a Biruni. El patrón de damasco, como se sabe por los experimentos de P.P. Anosov, es aleatorio, ya que durante la cristalización del acero al crisol se obtiene en cada caso individual un patrón diferente de heterogeneidad estructural.

Pero, como siempre, había un “pero”: las espadas de damasco temían las heladas del norte: el acero se volvía quebradizo y se rompía con facilidad. Pero los herreros encontraron una salida a esta situación. En Rusia se producía acero de damasco para “soldadura”. A este tipo de acero damasco se le llamó “Damasco”. Para obtener de esta manera el acero de damasco, tomaban trozos de alambre o tiras de hierro o acero, los doblaban uno a uno (hierro-acero-hierro-acero, etc.) y luego los forjaban muchas veces, retorcían muchas veces estas tiras, y los dobló como un acordeón. En resumen, cuanto más tiempo dedique un herrero a forjar metal, mejor resultará la hoja. La soldadura por patrones también se utilizó ampliamente. En este caso, la base de la hoja se soldó con hierro central y dos tiras exteriores especialmente soldadas. Estos últimos, a su vez, se soldaron a partir de varias varillas con diferente contenido de carbono, luego se retorcieron varias veces y se forjaron formando una tira. Al bloque de la base de la hoja presoldado y preparado, se soldaron tiras de acero en el extremo: futuras hojas. Después de soldar, la hoja se forjó de modo que las tiras de acero se extendieran sobre la hoja. Habiendo forjado una hoja de un tamaño determinado, se sacó el mango. La siguiente operación mecánica fue cepillar los valles. Luego la hoja fue rectificada y tratada térmicamente. Después de esto, se pulía la hoja y, si se hacía una soldadura estampada en la base de la hoja, se grababa. El herrero también hizo la base de la mira y el pomo del mango. A veces, las hojas de acero soldadas se sometían a una carburación adicional antes del tratamiento térmico.

1. Espada de Karabichev. El mango es de tipo europeo-ruso, el adorno es de tipo bizantino. Primera mitad siglo XI

2. Espada de Foschevataya. El mango es de tipo escandinavo, en la hoja hay una inscripción rusa: "Lyudota Koval". siglo X

3. Espada del entierro de un guerrero en
Calle Vladímirskaya. en Kyiv. siglo X

4. Espada tipo escandinavo con
Rápidos del Dniéper. siglo X

5. Sable tipo magiar. Gočevo. siglo X

El acero damasco también se diferenciaba en la naturaleza del patrón: si el patrón era recto ("rayado"), era un acero damasco malo, si entre las líneas había curvas, era un damasco bueno ("corriente"), un patrón "ondulado" era muy valorado, un patrón "de malla" era un patrón muy valorado, y si entre los patrones había un adorno, se veían figuras humanas o animales; ese acero de damasco no tenía precio. Naturalmente, una buena espada de damasco era muy, muy cara: la compraron por una cantidad de oro igual al peso de la espada (1,5-2 kg; esto es para productos exclusivos extremadamente raros), por lo que había muchas supuestamente damasco. espadas en el mercado, pero en realidad falsas: solo estaban cubiertas en la parte superior con una fina capa de acero de damasco y en el interior había hierro. Para evitar una mala compra, la espada fue probada: primero, mediante timbre: cuanto más largo, más alto y más puro sea el timbre de la hoja, mejor será el metal, y también, como se mencionó anteriormente, se probó su elasticidad. Los propios maestros también se preocupaban por su autoridad, y todo buen herrero tenía una marca que garantizaba la calidad de la espada.

La empuñadura de la espada merece una discusión aparte. Entonces el mango no era sólo un “empuñadura para sostener un arma”, sino una obra de arte. Las buenas espadas tenían hermosos mangos con motivos florales, repitiendo la forma del Árbol del Mundo. Un atributo indispensable del mango de una espada eslava era la llamada "manzana", un mango al final. Está ahí no solo por belleza: actúa como un equilibrador: para acercar el centro de gravedad del arma al mango; es mucho más conveniente trabajar con un arma de este tipo que con un arma sin contrapeso.

La espada se llevaba envainada. A veces se encuentran remates de bronce y plata y otras decoraciones de vaina entre el material arqueológico. En las crónicas hay expresiones "desenvaina tu espada", etc. La vaina estaba hecha de madera, cubierta con cuero en la parte superior y se hicieron superposiciones de metal a lo largo de los bordes. Con la ayuda de dos anillos, cerca de la boca de la vaina, la espada se suspendía, a veces del cinturón y más a menudo de una honda, que se llevaba sobre el hombro izquierdo. La espada yacía al lado de la persona en el entierro. Se han encontrado en entierros desde el siglo IX; antes, la espada se consideraba propiedad de la familia y no se colocaba en los entierros. Es interesante que cuando el dueño de la espada murió y la espada fue enterrada con él, intentaron "matar" la espada (¡después de todo, era un ser vivo!), doblarla, romperla.

Las características tácticas y técnicas de las espadas difieren según el momento y lugar de su fabricación y su tipo. A menudo dependían de los gustos individuales de los compradores, así como de sus características físicas. Entonces, si la longitud de la espada del guerrero adulto mayor enterrado en el montículo de Chernigov, Chernaya Mogila, es de 105 cm, entonces la longitud de la espada de su compañero joven es de 82 cm. La longitud promedio de las espadas rusas antiguas es de 80 a 105 cm. , el ancho de la hoja es de 4 a 6 cm, el grosor de la parte media de la hoja es de 2,5 a 6 mm, el peso es de 1 a 1,5 kg. El valor de la espada fue grande. Si una lanza y un escudo valían 2 sólidos, entonces una espada y un casco valían 6 sólidos. Este precio correspondía al precio de 6 toros, 12 vacas, 3 sementales o 4 yeguas. La espada en Rusia siempre ha sido objeto del negocio armamentista. Los antiguos comerciantes rusos compraban y vendían productos propios y extranjeros. Un mensaje interesante de los escritores orientales es que trajeron espadas asombrosas de Artania (como llamaban a Rusia), que podían doblarse por la mitad, después de lo cual la hoja volvía a su forma original. Sin embargo, esto es, por supuesto, una exageración. Ni Occidente ni Oriente tenían tales armas en ese momento.

hacha de batalla

La encarnación terrenal del arma gloriosa del gran Perun estaba muy extendida en Rusia nada menos que la espada. A menudo se oye decir que el hacha es un arma puramente de gángsters (recordemos la canción infantil: “Trabajadores de cuchillos y hachas, románticos de la carretera principal”) y que en la antigua Rusia sólo la empuñaban los ladrones. Es un engaño. De hecho, el hacha, junto con la espada, estaba al servicio de los escuadrones principescos. El hacha también era una herramienta indispensable para erigir dispositivos mecánicos militares, barreras de fortificación y para despejar caminos en el bosque. El hecho de que esta arma rara vez se encuentre en la epopeya heroica es extremadamente simple: el hacha era el arma de un guerrero exclusivamente a pie, mientras que el héroe de la epopeya tiene un compañero obligatorio: un caballo fiel (por la misma razón, muchos héroes en las epopeyas tienen un sable en lugar de una espada). Los soldados de infantería veneraban y amaban el hacha, especialmente porque el culto al gran dios de la guerra está asociado con ella (ver la sección "El guerrero en el mundo eslavo"). El hacha era conveniente en la batalla con guerreros fuertemente armados, podía buenas manos es fácil dividir un escudo o romper una cota de malla.

Existe la opinión de que el hacha de batalla era de tamaño enorme en comparación con la de trabajo. Por ejemplo, hay muchas pinturas donde en manos de un eslavo o un vikingo hay un hacha enorme, con una hoja casi tan larga como el codo de un guerrero. Esto es un engaño, una exageración de los artistas. De hecho, el peso hacha de batalla no excedía los 500 gramos y sólo los verdaderos héroes podían permitirse un hacha más grande. Por supuesto, cuanto más grande es el hacha, mayor es su poder destructivo, pero ¿vale la pena descuidar la velocidad en aras de la monstruosa fuerza del golpe, porque mientras el guerrero balancea su enorme arma, un oponente ágil podrá volar? su cabeza tres veces, por ejemplo, con un sable láser. Las hachas de batalla tenían forma de obrera, pero eran algo más pequeñas. Los guerreros eslavos estaban familiarizados con una gran cantidad de formas y diseños de hachas de batalla. Entre ellos se encuentran los que vinieron del este, por ejemplo, las hachas martilladas, más parecidas a un pico que a un hacha, los escandinavos dieron a los eslavos un hacha de hoja ancha, y en aquellos días un hacha se llamaba principalmente trabajo, carpintero. hacha. Sin embargo, sus proporciones son algo inusuales.

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Gran hacha de trabajo. En terminología inglesa, “broad axe”, es decir, “hacha ancha” Hachas de batalla: perseguidas y barbudas Hacha de batalla danesa de dos manos Breidox, también conocida como hacha de batalla, ejemplo

Estamos acostumbrados a ver en películas y cuadros a un guerrero semisalvaje sosteniendo un hacha enorme con un mango corto; todo es todo lo contrario. El mango del hacha a veces superaba el metro de longitud, la hoja del hacha medía entre 17 y 18 cm de largo y pesaba en promedio entre 200 y 450 g, mientras que el peso del hacha campesina (hacha) era de 600 a 800 g. Estas hachas se extendieron por todo el territorio. El norte de Europa a finales de los siglos X y XI. Otro tipo interesante de hacha es la que tiene un borde superior recto y la hoja hacia abajo. Estas hachas se extendieron a Noruega, Suecia y Finlandia en los siglos VII-VIII. En Rusia y Finlandia aparecen en Siglos X-XII y encuentra gran popularidad aquí: un hacha de este tipo no solo corta, sino que también corta.

Entonces, en el siglo XI, existían varios tipos principales de hachas de batalla:

hacha barbuda(Skeggox entre los escandinavos): es fácil de reconocer por su hoja con una barba inclinada hacia abajo, el peso del hacha es de 300 a 400 gramos + eje.

klevtsy- hachas con una hoja triangular, que recuerda vagamente a una daga, a menudo con una superficie acanalada. Las heridas que les infligieron prácticamente no sanaron;

mentas- una especie de pico, hachas con una hoja estrecha y alargada, diseñadas para perforar armaduras debido a la pequeña superficie de la superficie de impacto; desde el siglo XIV, el extremo estrecho se ha vuelto desafilado y el martillo se ha convertido en una batalla martillo;

ejes(de uso cercano a una alabarda, entre los escandinavos Breidox): hachas con una hoja ancha montada en un mango de hasta 1,8 metros de largo. A menudo también tenía un pomo xifoides. En Europa se llamaba “hacha de asta” o “bardishe”; es posible que fuera la presencia de la punta en el fondo del eje lo que la distinguía de las hachas de trabajadores y campesinos. Los anticuarios suelen vender grandes hachas de trabajo, llamándolas "Hacha heroica" o "Alabarda". Más tarde, en los siglos XVI-XVII, la alabarda se convirtió en un berdysh, un arma de fusil. El nombre probablemente proviene de la palabra alemana “barda” (opciones: “brada”\ “barta”\”helmbarte”) que significa “hacha de hoja ancha”; por cierto, otro argumento a favor del nombre “alabarda”.

1. pedazo de hierro
2. mango de hacha
3. calcetín
4. hoja
5. barba
6. lienzo
7. cuello
8. ojo
9. trasero

Las hachas de batalla se utilizaron principalmente en el norte, en la zona forestal, donde la caballería no podía dar la vuelta. Por cierto, los jinetes también usaban hachas de batalla: incluso un hacha pequeña con un eje de un metro de largo tiene un gran poder de penetración. Llevaban hachas en el cinturón, en estuches especiales de cuero, o las sujetaban a la silla.

Los klevtsy y las hachas acuñadas eran las armas tradicionales de los nómadas, pero a partir del siglo XI, después de la victoria sobre el Khazar Khaganate y el desarrollo de la caballería en la Rus de Kiev, nuestros antepasados ​​comenzaron a utilizar hachas pequeñas pero muy letales.

La técnica de trabajar con hachas de batalla variaba según los tipos individuales. Según la clasificación oficial de combate, esta arma pertenece al arma y media, es decir. Las hachas se sostenían con una o dos manos, todo dependía del tamaño de la culata, el mango del hacha y la fuerza del guerrero. Las hachas de hoja ancha, como una alabarda, tenían un mango largo y eran estrictamente de dos manos, ya que pesaban decentemente. Al final del mango solía haber un pomo diseñado para un mejor agarre en la mano.

A ninguno de los guerreros se le ocurriría talar árboles o cortar leña con un hacha de guerra, como se describe en las películas y la literatura. Los autores confunden claramente un hacha de trabajo (aquí nuevamente hay confusión en la terminología, ya que la herramienta de un leñador a menudo se llamaba hacha) con una de combate. En un hacha destinada al combate, la forma de la hoja ha sufrido cambios significativos (por supuesto, no hasta el punto de imitar las alas de un murciélago; la pretensión es el privilegio de las insignias ceremoniales) y no era adecuada para el trabajo diario.

Un tipo de hacha puramente nacional, como si tuviera barba. Es ideal para el combate y combina las mejores cualidades de un arma. Su hoja está curvada hacia abajo (por lo que también podría cortar), y la pendiente de la hoja es tal que la eficacia del golpe tiende a la unidad: toda la fuerza aplicada por el guerrero va directamente al golpe y se concentra en su parte superior, lo que le dio al golpe una enorme fuerza. Se colocaron “mejillas” a los lados de la culata, la parte trasera se reforzó con “dedos”, los cuales estaban destinados a asegurar urgentemente el hacha al mango del hacha (mango de madera), además, lo protegían cuando se incrustaba profundamente. Había que balancear el hacha para poder sacarla. Las hachas de esta forma se utilizaban tanto para el combate como para el trabajo. Desde el siglo X se han extendido a Rusia y se han convertido en los más en forma masiva hacha. Por supuesto, otras naciones también apreciaron el invento ruso: los arqueólogos encuentran hachas similares en toda Europa (sin embargo, estos hallazgos no se remontan a antes de los siglos XI-XI, lo que demuestra precisamente origen eslavo tal hacha).

Una característica del hacha rusa es el misterioso agujero en la hoja del hacha. Los científicos han propuesto varias hipótesis, desde que se trata de la marca de un maestro hasta que se insertó una varilla allí para que el hacha no se atascara profundamente al impactar. De hecho, todo resultó ser mucho más simple: en este orificio se sujetó una funda de cuero para el hacha para un transporte seguro, y el hacha también se usó para colgar el hacha de la silla o en la pared.

Sable

En el territorio de la antigua Rusia, el sable apareció a finales del siglo IX y principios del X. – y en algunos lugares luego compite con la espada. Este tipo de arma entró en el país junto con los nómadas, presumiblemente los jázaros.

El sable, al igual que la espada, es del tipo de hoja larga. La hoja, por regla general, tiene un afilado unilateral, ya que esto permite aumentar la resistencia al engrosar la columna. Un sable se diferencia de una espada, en primer lugar, por la forma de la parte de trabajo; además, (teóricamente) se puede doblar en un ángulo de 90 grados sin riesgo de romperse. Dado que la hoja de un sable es más liviana que la hoja de una espada, para mantener la misma fuerza de impacto, el extremo de la hoja se expande y el ángulo entre los lados que forman la punta se hace de tal manera que la hoja no se astilla y generalmente se corta. unos 15 grados. La flexibilidad de la hoja también está determinada por el ángulo de la hoja.

Longitud del sable– unos 90 cm, peso – 800-1300 g. Esta arma estaba especialmente extendida en el sur, donde la mayor parte de las tropas era la caballería. Como se mencionó anteriormente, la espada era extremadamente incómoda para el jinete debido a su pesadez, al carecer de suficiente flexibilidad de la hoja y del centro de gravedad aplicado a la guardia; era necesario encontrar un reemplazo. Aquí es donde resultó útil el sable, adoptado de los nómadas, pueblos que pasan la mitad de su vida en la silla de montar. El caso es que, debido a la curvatura de la hoja, el centro del golpe de un arma de sable se dirige hacia el extremo frontal del combate, lo que permite asestar golpes verticales de arriba a abajo, con un retroceso que aumenta la longitud. y profundidad de la herida. Incluso si el enemigo no falló de inmediato, pronto se debilitó por la pérdida de sangre y el dolor. Además, una hoja bastante ancha te permite bloquear eficazmente los ataques del oponente.

La guarda del sable, a diferencia de la espada, tenía forma redonda. Posteriormente, se reduce para no interferir con la extracción de las armas de la vaina, para que no se peguen a la silla, y posteriormente, hacia el siglo XII, desaparece por completo.

La empuñadura del sable solía estar hecha de cuero curtido en varias capas. Dado que el arma provenía de la estepa y no fue reconocida como “nuestra” desde el principio, no iba acompañada de un aura tan mágica como una espada. Por lo tanto, los sables rusos, a diferencia de los orientales, no podían presumir de una riqueza especial de decoración. Aquí, en primer lugar, no se preocupaban por la belleza, sino por la facilidad de uso. En las frecuentes pequeñas escaramuzas con destacamentos de nómadas, todo se decidía por la velocidad, los guerreros simplemente no podían perder preciosos segundos, y con ellos sus cabezas, debido a que la punta del mango se adhiere a todo.

Había dos tipos de hojas de sable en Rusia: jázaro-polovtsiana y turca (cimitarra). Presumiblemente, la síntesis de estos tipos fue la tercera: Yaloman, que estaba muy extendida solo en los principados orientales. Yalomani se caracteriza por una expansión afilada en forma de hoja del extremo frontal de combate.

La diferencia fundamental entre una espada y un sable es que una espada es un arma cortante, mientras que un sable es un arma cortante. Aunque se cree que el sable es un arma típicamente oriental, sin embargo, desde el siglo VII al XIV, la espada recta prevaleció entre los árabes y persas, al igual que en Europa. Los nómadas amaban el sable: los pechenegos y los jázaros. Los jinetes ligeros armados con sables causaron muchas pérdidas en las ciudades y fortalezas fronterizas rusas. Aparece por primera vez en las estepas euroasiáticas alrededor de los siglos VII-VIII. La patria del sable se extiende desde Hungría, el Mar Checo hasta Altai y Siberia meridional. A partir de este territorio el sable comenzó a extenderse entre las tribus vecinas. En las crónicas suele haber un contraste entre el sable jázaro y la espada recta rusa. Sin embargo, en los territorios fronterizos con los nómadas, los guerreros también preferían el sable: como tenían que enfrentarse a los jinetes, el sable era respetado por los guardias fronterizos montados, porque es muy conveniente para un guerrero montado. Pero aún así, el sable no puede desplazar a la espada recta, que tenía tradiciones centenarias a sus espaldas, era conveniente tanto para los guerreros a pie como para los guerreros a caballo.

Los sables de los siglos X-XIII están ligeramente curvados y uniformemente, aproximadamente como los sables cosacos de finales del siglo XIX. Y a partir del siglo XIV se vuelven torcidos y más pesados; a principios del siglo XVIII volvieron a enderezarse. La producción de sables no difería fundamentalmente de la producción de espadas. Sin embargo, tenían mucha menos decoración. Esto se debe al hecho de que la espada estaba decorada con fines mágicos: tenían adornos y patrones mágicos, piedras preciosas como recompensa por un buen servicio en la batalla. En los siglos X-XI la longitud de la hoja del sable era de aproximadamente 1 m con un ancho de 3 a 3,7 cm, en el siglo XII se alargó de 10 a 17 cm y alcanzó un ancho de 4,5 cm. La razón de esto es el peso de la armadura. Llevaban un sable, como una espada, en el cinturón. Los eslavos, que adoptaron el sable de los pueblos de la estepa, avanzaron aún más en su distribución, hasta Europa occidental. Según los historiadores, fueron los artesanos eslavos y húngaros quienes fabricaron el legendario sable de Carlomagno, que más tarde se convirtió en un símbolo ceremonial del Imperio Romano.

Cuchillo

Una de las armas eslavas más antiguas. Las armas de hoja corta en el antiguo arsenal ruso estaban representadas por cuchillos y, más tarde, dagas. De
este tipo de hoja larga se distingue por el tamaño de la parte de trabajo, que no supera el medio metro, y por formas de hoja más diversas; la diferencia entre los tipos antes mencionados estaba en la forma de la hoja, las características funcionales y el número de lados afilados.

cuchillos De hecho, eran más una herramienta que un arma. Tenían un afilado unilateral, aunque para facilitar la penetración durante los puñaladas, la hoja se afilaba un poco por el lado de la culata, unos 5-6 cm. Los cuchillos rusos se caracterizan por una hoja ancha, maciza y pesada, que recuerda más a un cuchilla, generalmente destinada a picar. La punta y la propia hoja tenían predominantemente forma de espada.

Llevaban cuchillos en el cinturón. La forma de usarlo detrás de la bota, que estaba muy extendida en Europa, no se observó en Rusia, probablemente porque las botas rusas se ajustaban a la pierna y era simplemente imposible esconder un arma en ellas. Tantos rusos son héroes obras de arte, sacar a los “zapateros” parece un poco extraño.

En cuanto a las dagas, su aparición en el siglo XIII se explica por el fortalecimiento de la armadura protectora, en particular, la aparición de la armadura de placas. La daga (del árabe "khanjar", cuyo significado no se conoce del todo) es "un arma cortante y punzante con una hoja y un mango cortos, rectos o curvos, de uno o dos filos". Eso es lo que dice el diccionario. Se deberían hacer pequeñas modificaciones a esta definición que se relacionen directamente con la daga rusa. Tenía un afilado principalmente de doble cara y, por regla general, estaba destinado a golpes penetrantes; su delgada hoja penetraba fácilmente el espacio entre las placas, provocando profundas heridas punzantes. En el sur y el este se utilizaban dagas curvas. Además del mango, también había una guarda; el arma era una versión más pequeña de una espada. Lo llevaban de la misma manera, detrás del cinturón, y ocasionalmente lo escondían en la manga.

Las guardas de cuchillos y dagas tenían predominantemente forma de cruz y de tamaño relativamente pequeño. Los dos tipos de armas se empuñaban de manera diferente: con una empuñadura de daga, el pulgar descansaba sobre la guarda, con una empuñadura de cuchillo, el dedo meñique, lo que permitía asestar golpes penetrantes y cortantes, respectivamente.

De hecho, el cuchillo es la única arma blanca que todavía se utiliza hoy en día tanto en el ejército como en la vida cotidiana, y tiene muchas modificaciones. Las dagas se transformaron en bebuts, uno de los tipos auxiliares de armas blancas utilizadas por los equipos de ametralladoras del Ejército Rojo, y en bayonetas baguette, dejando de existir como un tipo independiente. Además, el cuchillo era una herramienta de caza indispensable. Armado con un buen arco y buen cuchillo, el cazador no le tenía miedo a nadie en el bosque, ni siquiera a un oso. El cuchillo ayudó, si era necesario, a cortar la presa en el mismo lugar, en el bosque, y llevársela a casa en partes.

Una lanza

Una lanza, como un cuchillo, es un arma universal de caza militar. Eslavo antiguo, armado con una lanza, podía matar sin ayuda a un oso grande. Las puntas de lanza son un hallazgo común para los arqueólogos, superadas en número después de las puntas de flecha. En las crónicas, la expresión “romper la lanza” es casi sinónimo de batalla.

La lanza, el arma favorita de los guerreros y milicias rusos, era un eje largo de 180-220 cm hecho de madera duradera, con una punta de acero (acero de damasco) o hierro. El peso de la punta era de 200 a 400 gramos, la longitud era de hasta medio metro. Las puntas de la Rus premongola se dividían en aproximadamente siete tipos, según la forma de la parte de trabajo. El eje ("árbol", "viruta", "oskepische") estaba hecho de tipos de madera como abedul, roble, fresno y arce. Tenía entre 2,5 y 3,5 cm de diámetro y, a veces, el eje estaba sujeto con metal para que el enemigo no lo cortara. Encima se colocó una punta con un manguito (donde se insertó el eje). Las puntas alcanzaron medio metro de longitud. Hubo casos en los que se utilizaron "espadas" enteras en un palo, que no solo podían apuñalar, sino también cortar bastante bien. Las formas de las puntas eran variadas, pero aún predominaban las puntas triangulares alargadas. El grosor de la punta alcanzaba 1 cm y el ancho, hasta cinco cm. Ambos bordes cortantes estaban afilados. Se fabricaron puntas totalmente de acero y compuestas: se colocaron dos placas de hierro sobre una tira de acero en el centro; dicha punta resultó ser autoafilable.

Los jinetes también usaban lanzas, pero no como los caballeros europeos medievales en los torneos. El ariete apareció en Rusia recién en el siglo XII debido a la armadura más pesada. Del siglo IX al XII, los jinetes golpeaban con una lanza de arriba a abajo, habiendo previamente balanceado la mano. En primer lugar, esta lanza se distinguía por su longitud (3 m) y la forma de la punta. Desde el siglo X se ha ido extendiendo una punta tetraédrica alargada.

También existía un tipo interesante de lanza con una longitud de punta de 30 cm y un peso de aproximadamente 1 kg. Y el diámetro interior del manguito es de unos 5 cm y la punta tiene forma de hoja de laurel. Su ancho es de hasta 6 cm y su espesor es de 1,5 cm. arma formidable llamado con cuernos. Se conoce en Rusia desde la antigüedad, pero en el siglo X perdió su relevancia, dando paso a otro tipo de armas en el campo de batalla, y más bien se convirtió en un arma de caza. Recuerdo la lanza en el siglo XII, cuando, como ya se mencionó, hubo un aumento significativo en la armadura. Sólo un guerrero experimentado podría manejar bien una lanza. Fácilmente podría vencer incluso a un caballero cruzado con él. Los cazadores se atrevían a cazar osos y jabalíes con lanzas. Posteriormente en el siglo XIII aparece búho, un híbrido de cuchillo y lanza. Era una hoja, afilada por un lado, con una característica forma de cuchillo en el mango de una lanza. En Europa occidental, este arma se llamaba "guja" y era utilizada por la infantería. El búho estaba "pegado" al cuerpo de un guerrero ligeramente armado y fue utilizado por la caballería ligera rusa de los siglos XV-XVI. Y además, desde la antigüedad hasta casi la actualidad, el búho sirvió como herramienta de trabajo: para recortar astillas, descortezar un árbol y cazar animales salvajes.

Todos estos tipos de lanzas no están destinados a ser arrojados. Por supuesto, hay excepciones cuando, a toda costa, es necesario vengarse del enemigo en el fragor de la batalla. Para lanzar, se diseñaron lanzas ligeras especiales llamadas sulitsa (nuevamente, nadie prohibió apuñalarlas en casos excepcionales). Palabra sulitsa Proviene del verbo "prometer", que originalmente significaba "lanzar". Podemos decir que una sulitsa es algo entre una lanza y una flecha. La longitud de su asta es de 1,2-1,5 m, debido a que las lanzas fueron arrojadas y la mayoría se perdieron después de la batalla, no estaban decoradas de la misma manera que las lanzas y las lanzas. Además, por razones de economía, las puntas no se hicieron en forma de encaje, sino con tallos, y se fijaron a un lado, se clavaron en el árbol con el extremo del pecíolo en forma de gancho y se enrollaron con hilo, cuerda, corteza de abedul o cuero. al eje. Los sulitsa eran de caza, con puntas más anchas, diseñados para crear una gran herida, pero no podían penetrar armaduras fuertes, y militares, por el contrario, con puntas estrechas y perforantes.

Un rasgo característico de las lanzas es que no sólo eran utilizadas por la caballería para luchar contra los guerreros de a pie, sino que también eran utilizadas por la infantería para luchar contra los jinetes. Llevaban lanzas en la espalda o simplemente en la mano; a menudo eran llevados detrás del ejército, atados en un bulto. Esto no se aplicaba a las armas personales, ricamente decoradas o transmitidas, por ejemplo, por herencia; sólo, por así decirlo, armas producidas en masa del tipo más simple.

Además, cabe señalar que a las lanzas se les adherían penachos de crin, ligeramente por debajo de la punta. Estaban destinados a absorber la sangre que fluía por el eje para que las manos no resbalaran. Con el mismo fin se realizó una pequeña cornisa en la misma zona. Las puntas de las lanzas en los estandartes eran a menudo puramente decorativas.

Maza, maza, shestoper

En esta sección hablaremos no tanto sobre un arma mortal, sino sobre un arma desmoralizadora. Quien crea que las guerras antiguas se caracterizaban por un gran número de víctimas está profundamente equivocado. La tarea principal del ejército no era destruir completamente al enemigo, como muchos están tratando de hacer ahora, sino solo romper su resistencia, recaudar tributos, esclavizar a la gente y así garantizar la prosperidad de su pueblo. Hubo pocos muertos, mientras que más de las tres cuartas partes del ejército resultaron heridos (como lo confirman fuentes crónicas). Recuerde lo que decían del ejército victorioso: “venció a fulano de tal”. ¡No cortó, no cortó, solo latió! En tales batallas, los guerreros no se trituraban unos a otros como si fueran repollos, sino que simplemente los incapacitaban: los herían, los mutilaban y los aturdían. Las armas de este grupo son ideales para ello. A pesar de que no causa heridas sangrientas, puede aturdir al enemigo y romperle los huesos. Además, la armadura no salvó de un golpe hábil con un garrote o incluso un garrote: la cota de malla suave se hundió bajo los golpes de tales golpes, permitiendo que el arma infligiera un hematoma o fractura grave al enemigo. También era posible que la ola golpeara la cabeza mientras se llevaba un casco, aturdiera al enemigo o incluso rompiera el casco. Entonces esta arma era bastante funcional.

Tanto el garrote como la maza evolucionaron a partir de un simple garrote. Sin embargo, su sencillez no le impidió ser un arma excelente. Las milicias y los rebeldes a menudo se armaban con garrotes. Incluso en el ejército de Emelyan Pugachev había personas armadas sólo con garrotes. A pesar de su apariencia primitiva, el garrote puede causar enormes daños al enemigo, incluso romper huesos, y si recordamos la enorme fuerza de nuestros antepasados, no hay duda de que el garrote en sus manos era un arma verdaderamente mortal. La misma palabra "club" indica el material del que fue hecho. La mejor maza proviene del roble (perdón por el juego de palabras) o, en el peor de los casos, del olmo o del abedul. Además, un garrote como arma no es sólo una especie de inconveniente. La parte trasera de esta especie de árbol es la más adecuada para un garrote, y el lugar donde el tronco se une a las raíces es la parte nudosa y más fuerte del árbol, que se usaba para golpear en la batalla. Por otro lado, el palo fue tallado para lograr cierta ligereza y facilidad de agarre en las manos. También existía la práctica de meter clavos en tales garrotes, lo que aumentaba aún más la capacidad de aplastamiento del garrote, porque el garrote con púas no se desliza sino que golpea el objetivo. Sin embargo, la línea entre un garrote y un garrote con maza es muy delgada: en la épica “La palabra heroica”:

...Y sus palos [kalik] son ​​de olmo,
El plomo se vierte de punta a punta...

La maza estaba montada sobre un mango de madera, y los pomos de los más simples, como en esta epopeya, estaban hechos de aleaciones de cobre y en su interior se vertía plomo. Se forjaron cabezas de maza más poderosas con hierro. Las mazas y mazas de damasco también se mencionan en las epopeyas. Las mazas con mango de hierro no se encontraron hasta mediados del siglo XV, ni siquiera en la India, de donde nos llegaron más tarde. La diferencia fundamental entre una maza y una maza es el diseño del pomo. El garrote es ese arma con púas en forma de pera que estamos acostumbrados a ver en manos de los Bogatyrs; ya no tienen diferencias fundamentales. La maza, en cambio, se caracteriza por una forma algo cúbica con grandes púas triangulares.

La palabra maza significa "golpe", "perilla". La ojiva suele denominarse pomo y cabeza. Como ya se mencionó, la maza rusa antigua era, por regla general, una tapa de hierro o bronce, que pesaba entre 200 y 300 g, rellena de plomo, con un mango de madera de 50 a 60 cm de largo y 2 a 6 cm de espesor. A veces, para El enemigo no cortó la empuñadura del garrote, sino que estaba revestida con una lámina de cobre. La maza era utilizada principalmente por guerreros montados para asestar un golpe sorpresa en el casco o en el hombro. El club de los años X-XI se caracteriza por una forma cúbica con cuatro a seis púas piramidales. Este diseño sirvió como prototipo para la aparición en el siglo XIII de las llamadas mazas de pinza; la parte superior era un cubo con una larga púa en forma de garra. Otra forma de maza, esta vez más complicada, es la maza de múltiples púas. Fue hecho de tal manera que no importa cómo lo golpeara un guerrero, varias espinas perforarían al enemigo.

Desde el siglo XIV se ha extendido en Rusia el shestoper (también conocido como pernach), una maza con seis hojas aserradas, ubicadas aproximadamente en el mismo lugar que las plumas de una flecha. Al igual que otras armas, la maza estaba decorada con un patrón intrincado: entre las púas, los antiguos artesanos crearon una escritura intrincada. Shestoperas fueron traídas a nuestro territorio por los tártaros mongoles.

El molde para las mazas se hizo así: primero el maestro tomó cera e hizo un muñeco de la futura arma con ella, luego la cera se cubrió con arcilla en la parte superior. Se calentó el molde de arcilla y salió cera. El formulario está listo.

En Rusia había tanto mazas masivas simples como mazas doradas lujosas diseñadas específicamente para un guerrero noble.

Al final te contamos un sello interesante. Muchos artistas (los mismos que pintan hachas enormes y pesadas) proporcionan a sus héroes épicos enormes garrotes totalmente metálicos.

De hecho, como se mencionó anteriormente, el garrote pesaba solo 200-300, bueno, tal vez 500 gramos; esto fue suficiente para un buen golpe. Los garrotes de Stopudov son un montón de verdaderos héroes de los cuentos de hadas.

Mayal

1. eje
2. comunicación
3. batir
4. cordón

El mayal era el arma del ladrón de la antigua Rusia. Una herramienta ideal para golpear a personas prácticamente imposibles de matar, y además fácil de transportar. En general, una buena arma no es sólo para un ladrón, sino también para un viajero, para ahuyentar a estos mismos ladrones: "un puño es tan grande como un puño, y con él es bueno", dice el proverbio. A diferencia de la maza, esta arma es universal: puede golpear tanto al enemigo a pie como a caballo. Sin embargo, el mayal requiere que su propietario tenga gran habilidad para manejarse; de ​​lo contrario, será más frecuente que te golpees a ti mismo con el peso en la frente o en la espalda que al enemigo. El mayal también sirvió como arma para el guerrero. A veces se utilizaba la siguiente técnica: se ataban los mismos pesos a una cuerda y el guerrero, enrollando el extremo alrededor de su mano, lanzaba el peso al enemigo.

El mayal es un peso en forma de pera que pesa entre 100 y 500 g, sujeto a una cadena o cinturón que, a su vez, está sujeto al mango. Se puede argumentar que el mayal es una invención puramente rusa, que fue utilizada por los eslavos en el siglo VI. La palabra "mayal" probablemente no proviene de la palabra "cepillo", de una palabra turca que suena igual, sino que significa "palo", "garrote", aunque puede haber debate sobre este tema.

En el siglo X, el mayal se utilizó en toda Rusia. El peso estaba hecho de asta de alce muy duradera y pesada. Se perforó un agujero en una pieza de hueso en forma de pera, en el que se insertó una varilla de metal con un lazo, al que se unió una cadena o cinturón. Los mayales también estaban decorados como cualquier otra arma; en algunos de ellos se pueden ver signos principescos, patrones intrincados e incrustaciones de plata y oro. En el mismo siglo X, comenzaron a fabricar pesas de metal: pesas de hierro y bronce. La tecnología para su fabricación no difería de la producción de perillas para mazas.

Sin embargo, el mayal era más un arma popular que un arma militar. Los rebeldes no los despreciaron durante los levantamientos. Por ejemplo, el famoso líder del levantamiento checo del siglo XV, Jan Zizka, seguramente está representado con un mayal o un mayal de batalla (también un tipo de mayal).

Un mito igualmente extendido era la existencia en Rusia de mayales con varias cadenas. Estas armas se pueden encontrar en ejemplares únicos, no más. Esta modificación se difundió principalmente en Suiza y Alemania, donde se la conoce como "morgenstern" - traducido del alemán - estrella de la mañana.

Conclusión

De todo el rico arsenal de nuestros antepasados, solo se conservaron los cuchillos sin cambios especiales, así como las dagas transformadas en bayonetas, lo que le dio al arma de fuego propiedades perforantes, que permitieron su uso en combate cuerpo a cuerpo. Pero este es un tema para un estudio aparte.

También cabe señalar que a toda regla hay excepciones, y este trabajo se refiere a los tipos más comunes de armas fabricadas por los herreros rusos. No debemos olvidar que en Rusia, los guerreros individuales podían usar fácilmente tipos raros de armas que venían de otros países como trofeos, hechas por pedido especial, etc. Tales armas existían en ejemplares únicos, y no vale la pena afirmar, basándose, por ejemplo, en un solo hacha encontrada en un entierro, que los rusos tenían a Francisco o algo así. Los arqueólogos novatos y los expertos en armas cometen errores similares.

En la lucha de siglos, tomó forma la organización militar de los eslavos, surgió y se desarrolló su arte militar, que influyó en el estado de las tropas de los pueblos y estados vecinos. El emperador Mauricio, por ejemplo, recomendó que el ejército bizantino utilizara ampliamente los métodos de guerra utilizados por los eslavos...

Los soldados rusos eran hábiles en el uso de estas armas y, bajo el mando de valientes líderes militares, más de una vez obtuvieron victorias sobre el enemigo.

Durante 800 años tribus eslavas En la lucha contra numerosos pueblos de Europa y Asia y contra el poderoso Imperio Romano, occidental y oriental, y luego contra el Khazar Khaganate y los francos, defendieron su independencia y se unieron.

El mayal es un látigo corto con una bola de hierro suspendida en el extremo. A veces también se colocaban púas en la pelota. Asestaron terribles golpes con mayales. Con un mínimo esfuerzo, el efecto fue sorprendente. Por cierto, la palabra "aturdir" solía significar "golpear con fuerza el cráneo del enemigo".

La cabeza del shestoper estaba formada por placas de metal, "plumas" (de ahí su nombre). El shestoper, muy extendido principalmente en los siglos XV-XVII, podría servir como un signo del poder de los líderes militares, sin dejar de ser un arma seria.

Tanto la maza como el shestoper tienen su origen en la maza, una maza enorme con un extremo engrosado, generalmente envuelta en hierro o tachonada con grandes clavos de hierro, que también estuvo en servicio con los soldados rusos durante mucho tiempo.

Un arma cortante muy común en el antiguo ejército ruso era el hacha, que era utilizada por príncipes, guerreros principescos y milicias, tanto a pie como a caballo. Sin embargo, había una diferencia: los que iban a pie utilizaban con mayor frecuencia hachas grandes, mientras que los que iban a caballo utilizaban hachas, es decir, hachas cortas.

Para ambos, el hacha se colocó sobre un mango de madera con punta de metal. La parte trasera plana del hacha se llamaba culata y el hacha se llamaba culata. Las hojas de las hachas tenían forma trapezoidal.

Un hacha grande y ancha se llamaba berdysh. Su hoja, hecha de hierro, era larga y estaba montada sobre un hacha larga, que tenía un marco o hilo de hierro en el extremo inferior. Berdysh fueron utilizados únicamente por soldados de infantería. En el siglo XVI, los berdysh se utilizaban ampliamente en el ejército streltsy.

Más tarde, aparecieron alabardas en el ejército ruso: ejes modificados. varias formas, terminando en una lanza. La hoja estaba montada sobre un eje largo (hacha) y, a menudo, estaba decorada con dorado o estampado.

Un tipo de martillo de metal, que apuntaba hacia la culata, se llamaba mint o klevets. La moneda estaba montada sobre un hacha con punta. Había monedas con una daga oculta que se desenroscaba. La moneda no sólo servía como arma, sino que era un accesorio distintivo de los líderes militares.

Las armas perforadoras (lanzas y lanzas) no eran menos importantes que la espada como parte del armamento de las antiguas tropas rusas. Las lanzas y las lanzas a menudo decidían el éxito de una batalla, como fue el caso de la batalla de 1378 en el río Vozha en tierra de Riazán, donde los regimientos de caballería de Moscú derribaron a los ejército mongol y lo derrotó.

Las puntas de las lanzas eran perfectamente adecuadas para perforar armaduras. Para ello, los hacían estrechos, macizos y alargados, generalmente tetraédricos.

Las puntas, en forma de diamante, de hojas de laurel o de cuña ancha, podían usarse contra el enemigo en lugares no protegidos por armadura. Una lanza de dos metros con esa punta infligió laceraciones peligrosas y provocó la muerte rápida del enemigo o de su caballo.

La lanza constaba de un eje y una hoja con un manguito especial, que estaba montado en el eje. En la antigua Rusia, las flechas se llamaban oskepische (caza) o ratovishche (batalla). Estaban hechos de roble, abedul o arce, a veces utilizando metal.

La hoja (la punta de la lanza) se llamaba pluma y su manga se llamaba vtok. A menudo era totalmente de acero, pero también se utilizaban tecnologías de soldadura a partir de tiras de hierro y acero, así como totalmente de hierro.

Las varillas tenían una punta en forma de hoja de laurel, de 5 a 6,5 ​​centímetros de ancho y hasta 60 centímetros de largo. Para que al guerrero le resultara más fácil sujetar un arma, se colocaron dos o tres nudos de metal en el eje de la lanza.

Un tipo de lanza era la sovnya (búho), que tenía una franja curva con una hoja, ligeramente curvada en el extremo, que estaba montada sobre un eje largo.
La primera crónica de Novgorod registra cómo el ejército derrotado "... corrió hacia el bosque, arrojando armas, escudos, búhos y todo lo que tenía".

Sulitsa era una lanza arrojadiza con un mango ligero y delgado de hasta 1,5 metros de largo. Las puntas de las sulits son pecioladas y encajonadas.

Los antiguos guerreros rusos se defendían de las armas blancas y arrojadizas con la ayuda de escudos. Incluso las palabras “escudo” y “protección” tienen la misma raíz. Los escudos se han utilizado desde la antigüedad hasta la proliferación de las armas de fuego.

Al principio, los escudos servían como único medio de protección en la batalla; más tarde aparecieron cotas de malla y cascos. La evidencia escrita más antigua de escudos eslavos se encontró en manuscritos bizantinos del siglo VI.

Según la definición de los romanos degenerados: “Cada hombre está armado con dos lanzas pequeñas, y algunas de ellas con escudos, fuertes, pero difíciles de llevar”.

Una característica original del diseño de los escudos pesados ​​de este período fueron las troneras que a veces se hacían en su parte superior, ventanas para mirar. EN Alta Edad Media Los milicianos a menudo no tenían casco, por lo que preferían esconderse detrás de un escudo “con la cabeza”.

Según las leyendas, los berserkers mordían sus escudos en un frenesí de batalla. Los informes sobre esta costumbre suya son probablemente ficción. Pero no es difícil adivinar qué formó exactamente su base.
En la Edad Media, los guerreros fuertes preferían no sujetar su escudo con hierro en la parte superior. El hacha aún no se rompería al golpear la tira de acero, pero podría quedarse atascada en el árbol. Está claro que el escudo cazador de hachas tenía que ser muy duradero y pesado. Y su borde superior parecía "roído".

Otro aspecto original de la relación entre los berserkers y sus escudos era que los “guerreros con pieles de oso” a menudo no tenían otras armas. El berserker podía luchar con un solo escudo, golpeando con sus bordes o simplemente arrojando a los enemigos al suelo. Este estilo de lucha era conocido en Roma.

Los primeros hallazgos de elementos de escudo se remontan al siglo X. Por supuesto, solo se conservaron partes metálicas: umbones (un hemisferio de hierro en el centro del escudo, que servía para repeler un golpe) y herrajes (sujetadores a lo largo del borde del escudo), pero a partir de ellos fue posible restaurar la apariencia. del escudo en su conjunto.

Según las reconstrucciones de los arqueólogos, los escudos de los siglos VIII-X tenían forma redonda. Posteriormente aparecieron los escudos con forma almendrada, y a partir del siglo XIII también se conocieron escudos con forma triangular.

El escudo redondo ruso antiguo es de origen escandinavo. Esto hace posible utilizar materiales de cementerios escandinavos, por ejemplo, el cementerio sueco Birka, para reconstruir el escudo ruso antiguo. Sólo allí se encontraron los restos de 68 escudos. Tenían forma redonda y un diámetro de hasta 95 cm. En tres muestras se pudo determinar el tipo de madera del escudo: arce, abeto y tejo.

También se establecieron las especies de algunos mangos de madera: enebro, aliso, álamo. En algunos casos se encontraron mangos metálicos de hierro con revestimientos de bronce. Se encontró una placa similar en nuestro territorio: en Staraya Ladoga, ahora está almacenada en Colección privada. Además, entre los restos de escudos rusos antiguos y escandinavos, se encontraron anillos y soportes para sujetar el escudo al hombro.

Los cascos (o cascos) son un tipo de casco de combate. En Rusia, los primeros cascos aparecieron entre los siglos IX y X. En ese momento, se generalizaron en Asia occidental y la Rus de Kiev, pero eran raros en Europa occidental.

Los cascos que aparecieron más tarde en Europa occidental eran más bajos y se adaptaban a la cabeza, a diferencia de los cascos cónicos. antiguos guerreros rusos. Por cierto, la forma cónica ofrecía grandes ventajas, ya que la punta cónica alta impedía un golpe directo, lo cual es importante en las zonas de combate con sable a caballo.

casco tipo normando

Cascos encontrados en entierros de los siglos IX-X. tienen varios tipos. Así, uno de los cascos de los túmulos funerarios de Gnezdovo (región de Smolensk) tenía forma hemisférica, atado a los lados y a lo largo de la cresta (desde la frente hasta la nuca) con tiras de hierro. Otro casco procedente de los mismos entierros tenía una forma típicamente asiática: estaba formado por cuatro partes triangulares remachadas. Las costuras estaban cubiertas con tiras de hierro. Había un pomo y un borde inferior.

La forma cónica del casco nos llegó desde Asia y se llama "tipo normando". Pero pronto fue suplantada por el “tipo Chernigov”. Es más esférico, tiene forma esferocónica. En la parte superior hay pomos con casquillos para plumas. En el medio están reforzados con forros de púas.

Casco "tipo Chernigov"

Según los antiguos conceptos rusos, el traje de combate en sí, sin casco, se llamaba armadura; Posteriormente esta palabra pasó a referirse a todo el equipo de protección de un guerrero. Durante mucho tiempo, la cota de malla tuvo una primacía indiscutible. Fue utilizado a lo largo de los siglos X-XVII.

Además de la cota de malla, en Rusia se adoptó ropa protectora hecha de placas, pero no prevaleció hasta el siglo XIII. Las armaduras de láminas existieron en Rusia entre los siglos IX y XV, y las de escamas, entre los siglos XI y XVII. Este último tipo de armadura era particularmente elástica. En el siglo XIII se generalizaron una serie de artículos que mejoraban la protección del cuerpo, como calzas, rodilleras, petos (espejos) y esposas.

Para fortalecer la cota de malla o el caparazón en los siglos XVI-XVII en Rusia, se usaba una armadura adicional, que se usaba sobre la armadura. Estas armaduras se llamaban espejos. En la mayoría de los casos, consistían en cuatro placas grandes: delantera, trasera y dos laterales.

Las placas, cuyo peso rara vez superaba los 2 kilogramos, estaban conectadas entre sí y sujetas en los hombros y costados con cinturones con hebillas (hombreras y amitos).

Un espejo, pulido y pulido hasta obtener un brillo de espejo (de ahí el nombre de la armadura), a menudo cubierto con dorado, decorado con grabados y persecuciones, en el siglo XVII a menudo tenía un carácter puramente decorativo.

En el siglo XVI, en Rusia se generalizaron las armaduras anilladas y las armaduras pectorales hechas de anillos y placas interconectadas, dispuestas como escamas de pescado. Esta armadura se llamaba bakhterets.

Bakhterets se ensambló a partir de placas oblongas dispuestas en filas verticales, conectadas por anillos en los lados cortos. Las aberturas laterales y de los hombros se conectaron mediante correas y hebillas. Se agregó un dobladillo de cota de malla a los bakhterts y, a veces, se agregaron cuellos y mangas.

Peso promedio dicha armadura alcanzó los 10-12 kilogramos. Al mismo tiempo, el escudo, habiendo perdido su significado de combate, se convierte en un objeto ceremonial. Esto también se aplicaba al tarch, un escudo en cuya parte superior había una mano de metal con una hoja. Este escudo se utilizaba en la defensa de fortalezas, pero era extremadamente raro.

Bakhterets y escudo-tarch con un “brazo” de metal

En los siglos IX-X, los cascos se fabricaban a partir de varias placas de metal unidas entre sí mediante remaches. Después del montaje, el casco se decoraba con placas de plata, oro y hierro con adornos, inscripciones o imágenes.

En aquellos días, era común un casco alargado y suavemente curvado con una varilla en la parte superior. En Europa occidental no se conocían cascos de esta forma, pero estaban muy extendidos tanto en Asia occidental como en Rusia.

En los siglos XI-XIII, los cascos abovedados y esferocónicos eran comunes en Rusia. En la parte superior, los cascos a menudo terminaban con una manga, que a veces estaba equipada con una bandera: un yalovets. EN tiempo temprano Los cascos estaban hechos de varias (dos o cuatro) piezas remachadas entre sí. Había cascos hechos de una sola pieza de metal.

La necesidad de mejorar las propiedades protectoras del casco llevó a la aparición de cascos con lados pronunciados en forma de cúpula con nariz o máscara facial (visera). El cuello del guerrero estaba cubierto con una red-barmitsa, hecha de los mismos anillos que la cota de malla. Estaba unido al casco por la parte trasera y por los lados. Los cascos de los guerreros nobles estaban adornados con plata y, a veces, estaban completamente dorados.

La aparición más temprana en Rusia de un tocado con una cota de malla circular colgada de la corona del casco y una media máscara de acero atada desde el frente hasta el borde inferior, se puede suponer a más tardar en el siglo X.

A finales del siglo XII y principios del XIII, en relación con la tendencia paneuropea a hacer más pesadas las armaduras defensivas, aparecieron en Rusia cascos, equipados con una máscara que protegía el rostro del guerrero tanto de golpes cortantes como penetrantes. . Las máscaras faciales estaban equipadas con rendijas para los ojos y aberturas nasales y cubrían la cara hasta la mitad (media máscara) o por completo.

El casco con la máscara se puso sobre un pasamontañas y se usó con el aventail. Las máscaras faciales, además de su propósito directo: proteger la cara del guerrero, también debían intimidar al enemigo con su apariencia. En lugar de una espada recta, apareció un sable: una espada curva. El sable es muy conveniente para la torre de mando. En manos hábiles, el sable es un arma terrible.

Alrededor de 1380, aparecieron armas de fuego en Rusia. Sin embargo, las armas tradicionales cuerpo a cuerpo y a distancia ha conservado su significado. Picas, lanzas, mazas, mayales, lanzas, cascos, armaduras y escudos redondos estuvieron en servicio durante 200 años prácticamente sin cambios significativos, e incluso con la llegada de las armas de fuego.

A partir del siglo XII, las armas tanto de los jinetes como de la infantería se volvieron gradualmente más pesadas. Aparece un enorme sable largo, una espada pesada con una larga cruz y, a veces, una empuñadura y media. El fortalecimiento de las armas defensivas se evidencia en la técnica de embestir con una lanza, que se generalizó en el siglo XII.

El peso del equipo no era significativo, porque habría vuelto torpe al guerrero ruso y lo habría convertido en un objetivo seguro para el nómada estepario.

El número de tropas del antiguo estado ruso alcanzó una cifra significativa. Según el cronista León el Diácono, en la campaña de Oleg contra Bizancio participó un ejército de 88 mil personas, en la campaña a Bulgaria, Svyatoslav tenía 60 mil personas. Las fuentes nombran al voivoda y a los mil como el estado mayor al mando del ejército ruso. El ejército tenía cierta organización asociada con la organización de las ciudades rusas.

La ciudad exhibió un “mil”, dividido en cientos y decenas (por “fines” y calles). Los "mil" estaban al mando del tysyatsky, que era elegido por el veche; posteriormente, el tysyatsky era nombrado por el príncipe. Las "centenas" y las "decenas" estaban comandadas por sotskys y decenas electos. Las ciudades disponían de infantería, que en aquel momento era la rama principal del ejército y estaba dividida en arqueros y lanceros. El núcleo del ejército eran los escuadrones principescos.

En el siglo X, el término "regimiento" se utilizó por primera vez como nombre de un ejército que operaba por separado. En "La historia de los años pasados" del año 1093, los regimientos se llaman destacamentos militares llevados al campo de batalla por príncipes individuales.

Número de miembros el regimiento no estaba definido o, para decirlo de otra manera, el regimiento no era una unidad específica de división organizativa, aunque en la batalla, al colocar tropas en formación de batalla, la división de las tropas en regimientos era importante.

Poco a poco se desarrolló un sistema de sanciones y recompensas. Según datos posteriores, se concedían jrivnias de oro (aros para el cuello) por distinciones y servicios militares.

Hryvnia dorada y placas doradas: tapizado de un cuenco de madera con la imagen de un pez.

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Espada

La espada es la principal arma ofensiva del guerrero-combatiente ruso, un símbolo del poder principesco y el emblema militar de la antigua Rusia. La espada es un arma sagrada. Fue tratado como una persona, considerado animado.

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La espada constaba de una tira ancha, afilada por ambos lados, es decir, una hoja y un mango, cuyas partes se llamaban: manzana, negra y pedernal. Cada lado plano de la hoja se llamaba "golomen" y las puntas se llamaban "cuchillas". En el holomen se hicieron una muesca ancha o varias estrechas.

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Las hojas eran de acero o hierro, la espada se colocaba en una funda tapizada en cuero o, posteriormente, en terciopelo. La vaina estaba hecha de hierro y, a veces, decorada con muescas de oro o plata. La espada se colgaba del cinturón mediante dos anillas.

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hacha de batalla

El hacha estaba, junto con la espada, al servicio de los escuadrones principescos. El hacha era conveniente en la batalla con guerreros fuertemente armados; en buenas manos podía fácilmente romper un escudo o romper una cota de malla.

El peso del hacha de batalla no excedía los 500 gramos y sólo los verdaderos héroes podían permitirse un hacha más grande.

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Los soldados de infantería usaban con mayor frecuencia hachas grandes, mientras que los soldados a caballo usaban hachas, es decir, hachas cortas. El hacha se colocó sobre un mango de madera con punta de metal. La parte trasera plana del hacha se llamaba culata y el hacha se llamaba culata. Las hojas de las hachas tenían forma trapezoidal.

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Klevets

En Rusia había varios tipos de hachas de batalla:

Klevets es un martillo con una hoja en forma de triángulo que se asemeja a la hoja de una daga; a menudo sucedía que la hoja tenía nervaduras; cuando se infligía una herida con un hacha de este tipo, la herida prácticamente no sanaba.

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El hacha martillada es un arma blanca con una hoja estrecha y alargada, que recuerda un poco a un pico. Esta arma era buena para perforar la armadura de los enemigos.

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Un hacha grande y ancha se llamaba berdysh. Su hoja, de hierro, era larga y estaba montada sobre un hacha larga, que en el extremo inferior tenía un marco o hilo de hierro.

Las cañas se utilizaban como arma de asta y como soporte para una pesada pistola de mecha al disparar.

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Más tarde, aparecieron alabardas en el ejército ruso: hachas modificadas de varias formas que terminaban en una lanza. La hoja estaba montada sobre un eje largo (hacha) y, a menudo, estaba decorada con dorado o estampado.

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Las armas perforadoras (lanzas y lanzas) no eran menos importantes en el armamento de las antiguas tropas rusas que la espada. Las puntas de las lanzas eran perfectamente adecuadas para perforar armaduras. Para ello, los hacían estrechos, macizos y alargados, generalmente tetraédricos.

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Una lanza de dos metros con esa punta infligió laceraciones peligrosas y provocó la muerte rápida del enemigo o de su caballo. La lanza constaba de un eje y una hoja con un manguito especial, que estaba montado en el eje.

Estaban hechos de roble, abedul o arce, a veces utilizando metal. La hoja (la punta de la lanza) se llamaba pluma y su manga se llamaba vtok.

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Las varillas tenían una punta en forma de hoja de laurel, de 5 a 6,5 ​​centímetros de ancho y hasta 60 centímetros de largo. Para que al guerrero le resultara más fácil sujetar un arma, se colocaron dos o tres nudos de metal en el eje de la lanza.

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Sable

La diferencia fundamental entre una espada y un sable es que una espada es un arma cortante, mientras que un sable es un arma cortante. Los eslavos adoptaron el sable de las tribus esteparias (pechengs y jázaros), armas que utilizaban principalmente los guerreros a caballo.

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Cuchillo

El fiel compañero de todo guerrero.

En la batalla se usaba como arma cortante y como arma perforadora. arma cortante. A veces se arrojaba un cuchillo al enemigo y los guerreros eslavos se distinguían por su muy buena precisión en este asunto. El cuchillo se llevaba en el cinturón en una funda corta o simplemente metido en el cinturón.

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clubes y clubes

Las mazas y las mazas son los tipos de armas más antiguos que aparecieron mucho antes de la invención de los metales. No se requería ninguna habilidad especial para usar un garrote de madera y, por lo tanto, si fuera necesario, se podía armar con ellos a toda la milicia urbana o rural. “A veces incluso las mazas o palos se “cultivaban en el bosque”. Para ello, se clavaban fragmentos de piedras duras en la parte trasera (cerca de la raíz) de un roble joven, que al cabo de unos años estaba densamente cubierto de madera. Luego se utilizó ese baúl para hacer un garrote”.

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Mazo

La palabra maza significa "golpe", "perilla". La antigua maza rusa era, por regla general, un pomo de hierro o bronce, que pesaba entre 200 y 300 gramos, relleno de plomo y con un mango de madera de 50 a 60 cm de largo y 2 a 6 cm de espesor, a veces para que el enemigo no cortara. El mango de las mazas estaba revestido con láminas de cobre. La maza era utilizada principalmente por guerreros montados para asestar un golpe sorpresa en el casco o en el hombro.

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Shestoper

  • Shestoper es una maza con seis hojas recortadas ubicadas aproximadamente en el mismo lugar que el emplumado de una flecha.
  • Al igual que otras armas, la maza estaba decorada con un patrón intrincado: entre las púas, los antiguos artesanos crearon una escritura intrincada.
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    Mayal

    FRASCO: esta es el arma del ladrón de la antigua Rusia. Un mayal es una buena arma no solo para un ladrón, sino también para un viajero, para ahuyentar a estos mismos ladrones: "un mayal es del tamaño de un puño, y con él es bueno", dice el proverbio. A diferencia de la maza, esta arma es universal: puede golpear tanto al enemigo a pie como a caballo.

    Diapositiva 20

    El mayal es un peso en forma de pera que pesa entre 100 y 500 g, sujeto a una cadena o cinturón que, a su vez, está sujeto al mango.

    En el siglo X, el mayal se utilizó en toda Rusia. El peso estaba hecho de asta de alce muy duradera y pesada. Se perforó un agujero en una pieza de hueso en forma de pera, en el que se insertó una varilla de metal con un lazo, al que se unió una cadena o cinturón.

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    cota de malla

    La cota de malla es una armadura defensiva hecha de anillos de hierro entrelazados entre sí. Su parte más importante era la camisa (en realidad Chain Mail), en su mayoría de mangas cortas. También se fabricaban medias y guantes de combate con anillos de hierro. La relativa ligereza y flexibilidad de la cota de malla permitía al guerrero ser bastante móvil.

    Diapositiva 22

    La armadura de plástico estaba hecha de placas de metal interconectadas y colocadas una sobre otra.


    No es casualidad que nuestra historia sobre las armas de contacto de los antiguos eslavos comience con esta magnífica arma. La espada es la principal arma ofensiva del guerrero-combatiente ruso, un símbolo del poder principesco y el emblema militar de la antigua Rusia. Los guerreros de Igor juraron por la espada y concluyeron un acuerdo con los griegos en 944: “Y los rusos no bautizados, depongamos nuestros escudos y espadas desnudas” (y los rusos no bautizados depongamos sus escudos y espadas desnudas). un arma sagrada. Fue tratado como una persona, considerado animado. Las espadas únicas tenían nombres (recuerden la espada del Rey Arturo - Excalibur, o más precisamente - Kaledvukh: Excalibur es una distorsión del nombre "Caliburn", que es una distorsión de "Kaledvukh"), y estos nombres también eran hechizos mágicos. En Escandinavia, las espadas a menudo llevaban nombres como "Llama de Odín", "Sabueso de los cascos", "Escudos de fuego"; estos nombres fueron escritos por los antiguos artesanos en el tercio superior de la hoja. No hay duda de que Rusia no era inferior en esto a sus vecinos del noroeste: por ejemplo, cerca de Brest, se encontró una punta de lanza, en la que a lo largo de la hoja de acero estaban incrustados signos sagrados: una esvástica, símbolos solares y runas. inscripción "Tilariths" - "Atacante" (Runa - en general el nombre de la escritura escandinava antigua y eslava antigua: el nombre era el mismo, pero las filas de símbolos eran diferentes). Juraron con espadas en una disputa importante, hablaron con ellos. Así lo describe la balada danesa “The Avenging Sword”:

    Peder está en un rincón del patio,
    Es hora de que hable con la espada.
    Mi espada, renueva tu gloria
    ¿Quieres bañarte en sangre?
    Defiéndeme, mi espada,
    No tengo otros familiares.

    (Traducido por Ivanovsky, citado de “Scandinavian Ballad”, Leningrado, 1978)

    Todas las propiedades mágicas de un material relativamente nuevo para la humanidad, el metal, se transfirieron por completo a la espada. Al producir una espada, el herrero acompañaba el trabajo con hechizos y rituales mágicos. Cuando el herrero trabajaba, se comparaba con el Dios Creador Svarog y se sentía partícipe de la creación del mundo. Está claro que la espada, nacida en manos del herrero, tenía enormes propiedades mágicas. Surgió una fuerte conexión mágica entre la espada y el dueño. Era imposible decir exactamente quién era el dueño de quién. Vale la pena mencionar que en muchos idiomas la palabra "espada" es femenina, hay nombres de espadas femeninas (por ejemplo, la espada del caballero Roland se llamaba "Joyez" - "Joyful"), por lo que la espada podría ser tanto un amigo fiel como un amigo querido... No siempre se compraba una espada en el mercado: las mejores espadas no las compraban sólo por un puñado de oro, no todas las personas. Estas espadas eligen a su dueño: para tomar posesión de ellas, el héroe debe realizar una hazaña: tomar la espada en la batalla. Un ejemplo sorprendente es la conocida Espada del Tesoro, escondida bajo una piedra pesada: no todo el mundo podrá tirar esta piedra y conseguir un arma magnífica. Los eslavos también utilizaron las espadas para resolver disputas complejas: se utilizaron en duelos y en los tribunales.

    La espada rusa es el arma más difícil de fabricar. Si crees que una espada es sólo un cuchillo grande, estás equivocado. Ha recorrido un largo camino en mejoras. La historia de la espada comienza con un gran cuchillo de combate llamado “sax”, un arma común a todos los europeos. Sin embargo, tales cuchillos no eran efectivos en la guerra, y tan pronto como surgió la oportunidad de forjar una hoja más larga, los herreros expertos la aprovecharon de inmediato. Como resultado de esto, entre las tribus germánicas se está generalizando el "langsax", un arma cortante bastante larga, con una hoja afilada por un lado y de 3,5 a 4 cm de ancho y 40 a 60 cm de largo. El Langsax ya era bastante adecuado para su uso en batalla, sin embargo, para los guerreros montados que tenían que asestar golpes mientras estaban sentados en la silla, era algo corto. Como resultado, surgió un arma terrible: el "skarmasax", cuya hoja, aunque tenía 6,5 ​​cm de ancho, tenía entre 41 y 76 cm de largo. Además, a veces se encuentran skarmasax verdaderamente "heroicos", por ejemplo, los descubiertos en el cementerio de Fronnenstett. Su longitud era de 120 cm y el mango de 30 cm. Este diseño era muy letal y el mango largo permitía a los antiguos alemanes cortar mientras agarraban el skarmasax con ambas manos. Más tarde, el scarmasax en Europa fue reemplazado por la invención de los galos: spatha, que es una hoja de acero de doble filo. Fue a partir de spatha que se desarrolló el tipo de arma que solíamos llamar espada. Podemos decir que en el siglo VIII, en Europa y Rusia, el arma de doble filo ya estaba en pleno uso. Esta espada medía entre 70 y 130 cm de largo, 7 cm cerca de la empuñadura, se estrechaba suavemente hacia el final y pesaba entre 1 y 2 kg.

    Muchas clases se dividen en subclases de espadas, pero el criterio principal para el tamaño y la estructura de una espada medieval temprana es su empuñadura: luego estaban las de una mano (las más cortas), las de una mano y media, que un hombre fuerte lo sostenía con una mano, pero nadie le prohibía tomarlo con las dos manos y al Bogatyr con espadas a dos manos. Dependiendo del entorno, las espadas se hicieron más cortas y más largas de siglo en siglo. En los siglos XI-XII, debido a que las batallas se libraban en formación cerrada, las espadas se acortaron a una media de 86 cm y se volvieron más ligeras, menos de 1 kg, pero en los siglos XII-XIII, debido al fortalecimiento de armadura, la espada se hizo más masiva: la hoja se extiende hasta 120 cm y pesa hasta 2 kg.

    Durante el período de dominio en Rusia ciencia historica El normanismo, la teoría según la cual los vikingos llevaron la civilización a las "tierras salvajes de los eslavos", se creía que los eslavos aparecieron por primera vez con una espada en el siglo IX, e incluso entonces no era rusa en absoluto, sino escandinava. Pero la historia, para gloria de los dioses, puso todo en su lugar. Resultó que todas esas espadas que supuestamente fueron importadas de Europa extranjera resultaron ser hechas por herreros rusos, y que aún no se sabe quién influyó más en quién: los escandinavos sobre los eslavos o viceversa. Por ejemplo, durante mucho tiempo una hermosa espada con un intrincado patrón en la empuñadura, encontrada en la región de Poltava (Ucrania), fue considerada "puramente escandinava", sin embargo, después de un procesamiento especial de la hoja, apareció una inscripción en cirílico: “Liudota Koval”. ¿Y cuántas espadas más simples, sin esa “marca de calidad”, se consideraban importadas a Rusia?

    Hacer una espada es un asunto extremadamente complejo que requiere que el herrero tenga un conocimiento increíblemente profundo de las propiedades del metal. Como referencia: elegir una buena espada, un amigo confiable y un asistente en las batallas en Rusia era una cuestión difícil: la espada fue probada muchas veces. Por ejemplo, se colocó en la cabeza, y la empuñadura y la punta de la espada se acercaron hasta las orejas: una buena espada se enderezó inmediatamente después de ser retirada de la cabeza, y también tuvo que cortar fácilmente y sin embotamiento un clavo grueso. y cortar la tela arrojada sobre la cuchilla.

    ¡Y esto es en una época en la que, según las crónicas, en Rusia reinaban la oscuridad, la anarquía y la ignorancia! Entonces, la producción de una espada comenzó cuando el herrero elegía el diseño de la hoja, no solo la forma, sino también el material.

    Si crees que una espada es sólo un trozo de hierro áspero y afilado, estás profundamente equivocado. En aquella época existían diversos métodos para soldar hierro y acero de tal forma que el producto final tenía propiedades realmente sorprendentes. Por supuesto, lo más sencillo era hacer una espada totalmente metálica, pero ésta sólo era adecuada para los campesinos y para el entrenamiento en la guerra. El siguiente nivel eran espadas soldadas de 2 a 6 tiras de hierro y acero: se soldaba una hoja de acero a una pieza de hierro. Una espada así ya era adecuada para un joven guerrero o para un campesino en el servicio militar.

    Sin embargo, el verdadero marido militar tenía una espada completamente diferente. Todo el mundo conoce la palabra acero de damasco. ¿Lo que es? Esta palabra proviene del antiguo reino de Puluadi (el territorio de las actuales Turquía, Armenia, Georgia e Irán), donde se fabricaba el mejor acero del mundo en aquella época.

    De aquí proviene la palabra persa "puluad": acero, que en Rusia se convirtió en acero de damasco. En general, el acero es una aleación de hierro con otros elementos, principalmente carbono. Pero el acero de damasco no es sólo acero: las espadas de damasco fueron capaces de cortar durante muchos años, prácticamente sin perder el filo, cortar hierro y acero sin perder el filo, no doblarse, pero tampoco romperse. Todo se explica por el contenido heterogéneo del uno por ciento de carbono en el acero de damasco. Los antiguos herreros lo conseguían enfriando hierro fundido con grafito, una fuente natural de carbono. La hoja, forjada a partir del metal resultante, fue grabada y en su superficie aparecieron patrones característicos: rayas oscuras onduladas y retorcidas sobre un fondo más claro. Este fondo resultó ser gris oscuro, dorado o marrón rojizo, negro. El acero de damasco negro se consideraba más frágil; los guerreros experimentados preferían el tono dorado de la hoja.

    Pero, como siempre, había un “pero”: las espadas de damasco temían las heladas del norte: el acero se volvía quebradizo y se rompía con facilidad. Pero los herreros rusos encontraron una salida a esta situación. En Rusia se producía acero de damasco para “soldadura”. A este tipo de acero damasco se le llamó “Damasco”. Para obtener de esta manera el acero de damasco, tomaban trozos de alambre o tiras de hierro o acero, los doblaban uno a uno (hierro-acero-hierro-acero, etc.) y luego los forjaban muchas veces, retorcían muchas veces estas tiras, y los dobló como un acordeón. En resumen, cuanto más tiempo dedique un herrero a forjar metal, mejor resultará la hoja.

    Bulat también varió en calidad. Se distinguió por el tipo de patrón. Un patrón grande es un signo de buena calidad, con franjas de 10 a 12 mm, el acero damasco con un patrón de 4 a 6 mm se consideraba promedio. y muy simple era el acero damasco con un patrón delgado con un grosor de línea de 1-2 mm.

    El acero damasco también se diferenciaba en la naturaleza del patrón: si el patrón era recto ("rayado"), era un acero damasco malo, si entre las líneas había curvas, era un damasco bueno ("corriente"), un patrón "ondulado" era muy valorado, un patrón "de malla" era un patrón muy valorado, y si entre los patrones había un adorno, se veían figuras humanas o animales; ese acero de damasco no tenía precio. Naturalmente, una buena espada de damasco era muy, muy cara: la compraban por una cantidad de oro igual al peso de la espada (1,5-2 kg), por lo que había muchas espadas supuestamente de damasco en el mercado, pero de hecho Eran falsos: solo estaban cubiertos en la parte superior con una fina capa de acero de damasco y en el interior había hierro. Para evitar una compra fallida, se probó la espada: en primer lugar, mediante repique: cuanto más largo, más alto y más limpio sea el repique de la hoja, mejor será el metal, además, como se mencionó anteriormente, se probó su elasticidad, algunas muestras fueron probado doblándolo por la mitad: es decir, Bogatyrsky aplicó el extremo de la hoja al mango gracias al esfuerzo del comprador, después de lo cual el buen acero de damasco tomó su posición original. Los propios maestros también se preocupaban por su autoridad, y todo buen herrero tenía una marca que garantizaba la calidad de la espada.

    La espada tiene uno complicado. característica de diseño- dol, o, en términos simples, una ranura en el medio de la hoja. No sirve en absoluto para drenar la sangre de la espada, sino para aligerar el peso del producto; este es un indicador muy importante para una espada, porque a menudo la velocidad del golpe decide mucho, si no todo.

    La empuñadura de la espada merece una discusión aparte. Entonces el mango no era sólo un “empuñadura para sostener un arma”, sino una obra de arte. Las buenas espadas tenían hermosos mangos con motivos florales, repitiendo la forma del Árbol del Mundo. Un atributo indispensable del mango de una espada eslava era la llamada "manzana", un mango al final. Está ahí no solo por belleza: actúa como un equilibrador: para acercar el centro de gravedad del arma al mango; es mucho más conveniente trabajar con un arma de este tipo que con un arma sin contrapeso.

    La espada era un arma, en primer lugar, de valientes guerreros, boyardos y príncipes: no todos los guerreros poseían una espada: además del precio más alto, la técnica de empuñar una espada es muy compleja y no a todos les resultó fácil.

    La espada se llevaba en una funda de madera, cubierta con cuero en la parte superior y se hacían placas de metal a lo largo de los bordes. Las espadas se llevaban en el cinturón o detrás de la espalda, y los guerreros fuertemente armados las llevaban con mayor frecuencia cerca del cinturón: un arco, un escudo, a veces un tul (estuche para flechas) o una aljaba colgaban detrás de la espalda, mientras que detrás de la espalda, donde se proporcionaba una sujeción más confiable, aquellos guerreros que necesitaban mayor movilidad. La espada yacía al lado de la persona en el entierro. Se han encontrado en entierros desde el siglo IX; antes, la espada se consideraba propiedad de la familia y no se colocaba en los entierros. Es interesante que cuando el dueño de la espada murió y la espada fue enterrada con él, intentaron "matar" la espada (¡después de todo, era un ser vivo!), doblarla, romperla.

    Vale la pena decir algunas palabras sobre el uso de la espada en la batalla. La espada nació como un arma puramente ofensiva: los guerreros usaban sus espadas para abrirse camino hacia la meta. Y ojo: cortan, porque la espada es un arma puramente cortante. A menudo, incluso la punta de la espada se redondeaba. Lo apuñalaban como una espada en situaciones de emergencia: ya sea cuando un guerrero alcanzaba un estado de pasión (se convertía en un “berserker”) o cuando apuñalar a un enemigo era la única forma de herirlo (como, por ejemplo, un caballero cruzado protegido). por una concha). En general, la espada, desarrollada como un arma puramente ofensiva, no implicaba funciones defensivas, por lo que al principio ni siquiera tenía un "pedernal", una mira en el mango: los golpes no se detenían con la espada. En vista de esto, en los siglos VII-X la espada desarrolló esta misma mira, o como se llamaba en Rusia, "pedernal", y un escudo acompaña inextricablemente a la espada.


    La encarnación terrenal del arma gloriosa del gran Perun estaba muy extendida en Rusia nada menos que la espada. A menudo se oye decir que el hacha es un arma puramente de gángsters (recordemos la canción infantil: “Trabajadores de cuchillos y hachas, románticos de la carretera principal”) y que en la antigua Rusia sólo la empuñaban los ladrones. Es un engaño. De hecho, el hacha, junto con la espada, estaba al servicio de los escuadrones principescos. El hacha también era una herramienta indispensable para erigir dispositivos mecánicos militares, barreras de fortificación y para despejar caminos en el bosque. El hecho de que esta arma rara vez se encuentre en la epopeya heroica es extremadamente simple: el hacha era el arma de un guerrero exclusivamente a pie, mientras que el héroe de la epopeya tiene un compañero obligatorio: un caballo fiel (por la misma razón, muchos héroes en las epopeyas tienen un sable en lugar de una espada). Los soldados de infantería veneraban y amaban el hacha, especialmente porque el culto al gran dios de la guerra está asociado con ella (ver la sección "El guerrero en el mundo eslavo"). El hacha era conveniente en la batalla con guerreros fuertemente armados; en buenas manos podía fácilmente romper un escudo o romper una cota de malla.

    Existe la opinión de que el hacha de batalla era de tamaño enorme en comparación con la de trabajo. Por ejemplo, hay muchas pinturas donde en manos de un eslavo o un vikingo hay un hacha enorme, con una hoja casi tan larga como el codo de un guerrero. Esto es un engaño, una exageración de los artistas. De hecho, el peso del hacha de batalla no excedía los 500 gramos y sólo los verdaderos héroes podían permitirse un hacha más grande. Por supuesto, cuanto más grande es el hacha, mayor es su poder destructivo, pero ¿vale la pena descuidar la velocidad en aras de la monstruosa fuerza del golpe, porque mientras el guerrero balancea su enorme arma, un oponente ágil podrá volar? su cabeza tres veces, por ejemplo, con un sable láser. Las hachas de batalla tenían forma de obrera, pero eran algo más pequeñas. Los guerreros eslavos estaban familiarizados con una gran cantidad de formas y diseños de hachas de batalla. Entre ellos se encuentran los que vinieron del este, por ejemplo, las hachas martilladas, más parecidas a un pico que a un hacha, los escandinavos.

    A los eslavos se les dio la misma hacha o hacha de hoja ancha, y en aquellos días el hacha se llamaba principalmente hacha de carpintero de trabajo. Sin embargo, sus proporciones son algo inusuales.

    Estamos acostumbrados a ver en películas y cuadros a un guerrero semisalvaje sosteniendo un hacha enorme con un mango corto; todo es todo lo contrario. El mango del hacha a veces superaba el metro de largo, mientras que la hoja del hacha medía entre 17 y 18 cm de largo y pesaba en promedio entre 200 y 450 g, mientras que el peso de un hacha campesina era de 600 a 800 g. Estas hachas se extendieron por todo el territorio. El norte de Europa a finales de los siglos X y XI. Otro tipo interesante de hacha es la que tiene un borde superior recto y la hoja hacia abajo. Estas hachas se extendieron a Noruega, Suecia y Finlandia en los siglos VII-VIII. En Rusia y Finlandia aparecieron en los siglos X-XII y aquí adquirieron gran popularidad: este tipo de hacha no sólo cortaba, sino que también cortaba.

    El tipo de hacha puramente nacional, ideal para el combate y que reúne las mejores cualidades de un arma, era la siguiente: su hoja está curvada hacia abajo (por lo que también podía cortar), y la inclinación de la hoja es tal que la eficiencia del golpe tiende a la unidad: toda la fuerza, aplicada por el guerrero, va precisamente al golpe y se concentra en su parte media, lo que le dio al golpe un enorme poder. Se colocaron “mejillas” a los lados de la culata, la parte trasera se reforzó con “dedos”, los cuales estaban destinados a asegurar urgentemente el hacha al mango del hacha (mango de madera), además, lo protegían cuando se incrustaba profundamente. Había que balancear el hacha para poder sacarla. Las hachas de esta forma se utilizaban tanto para el combate como para el trabajo. Desde el siglo X, se han extendido a Rusia y se han convertido en el tipo de hacha más extendido. Por supuesto, otras naciones también apreciaron el invento ruso: los arqueólogos encuentran este tipo de hachas en toda Europa (sin embargo, estos hallazgos no se remontan a antes de los siglos XI-XI, lo que prueba el origen eslavo de tal hacha).

    Característica Hacha rusa: un agujero misterioso en la hoja de las hachas. Los científicos han propuesto varias hipótesis, desde que se trata de la marca de un maestro hasta que se insertó una varilla allí para que el hacha no se atascara profundamente al impactar. De hecho, todo resultó ser mucho más simple: en este orificio se sujetó una funda de cuero para el hacha para un transporte seguro, y el hacha también se usó para colgar el hacha de la silla o en la pared.


    La diferencia fundamental entre una espada y un sable es que una espada es un arma cortante, mientras que un sable es un arma cortante. Aunque se cree que el sable es un arma típicamente oriental, sin embargo, desde el siglo VII al XIV, la espada recta prevaleció entre los árabes y persas, al igual que en Europa. Los nómadas amaban el sable: los pechenegos y los jázaros. Los jinetes ligeros armados con sables causaron muchas pérdidas en las ciudades y fortalezas fronterizas rusas. Aparece por primera vez en las estepas euroasiáticas alrededor de los siglos VII-VIII. La patria del sable se extiende desde Hungría, la República Checa y el Mar del Norte hasta Altai y el sur de Siberia. A partir de este territorio el sable comenzó a extenderse entre las tribus vecinas. En las crónicas suele haber un contraste entre el sable jázaro y la espada recta rusa. Sin embargo, en los territorios fronterizos con los nómadas, los guerreros también preferían el sable: como tenían que enfrentarse a los jinetes, el sable era respetado por los guardias fronterizos montados, porque es muy conveniente para un guerrero montado. Pero aún así, el sable no puede desplazar a la espada recta, que tenía tradiciones centenarias a sus espaldas, era conveniente tanto para los guerreros a pie como para los guerreros a caballo.

    Los sables de los siglos X-XIII están ligeramente curvados y uniformemente, aproximadamente como los sables cosacos de finales del siglo XIX. La producción de sables no difería fundamentalmente de la producción de espadas. Sin embargo, tenían mucha menos decoración. Esto se debe al hecho de que la espada estaba decorada con fines mágicos: tenían adornos y patrones mágicos, piedras preciosas como recompensa por un buen servicio en la batalla. En los siglos X-XI la longitud de la hoja del sable era de aproximadamente 1 m con un ancho de 3 a 3,7 cm, en el siglo XII se alargó de 10 a 17 cm y alcanzó un ancho de 4,5 cm. La razón de esto es el peso de la armadura. Llevaban un sable, como una espada: en el cinturón o detrás de la espalda.

    Los eslavos, que adoptaron el sable de los pueblos de la estepa, avanzaron aún más en su distribución, hasta Europa occidental. Según los historiadores, fueron los artesanos eslavos y húngaros quienes fabricaron el legendario sable de Carlomagno, que más tarde se convirtió en un símbolo ceremonial del Imperio Romano.


    El fiel compañero de todo guerrero. Puede ayudar tanto en las tareas del hogar como en la batalla. En sentido estricto, un cuchillo de “combate” es cualquier cuchillo de más de 20 cm de longitud, aunque, como ya se mencionó, estos cuchillos eran más una herramienta universal que un arma en el pleno sentido de la palabra. En las crónicas, el uso de combate del cuchillo termina con la rematación del enemigo en un duelo, así como durante batallas particularmente brutales. El uso de cuchillos para botas, mencionados en la Balada, no está confirmado arqueológicamente. El cuchillo se utilizó en la batalla como arma cortante, perforante y cortante. A veces se arrojaba un cuchillo al enemigo y los guerreros eslavos se distinguían por su muy buena precisión en este asunto. El cuchillo se llevaba en el cinturón en una funda corta o simplemente metido en el cinturón.

    También es interesante la extraña costumbre que existió en los remotos pueblos del norte hasta el siglo XIX. Los muchachos del pueblo, armados con cuchillos, se reunieron por la noche en una choza, donde apagaron todas las luces y organizaron una pelea con cuchillos “todos contra todos”, y golpearon con toda su fuerza. Lo sorprendente es que casi no hubo víctimas. , contando cortes y abrasiones menores. Los científicos captan en esto un eco de la antigua disciplina de entrenar a jóvenes guerreros: el héroe no sólo debe ver, sino también sentir el golpe que le llega, ser capaz de pararlo sin la ayuda de sus ojos y devolver el golpe correctamente.

    Además, el cuchillo era una herramienta de caza indispensable. Armado con un buen arco y un buen cuchillo, el cazador no temía a nadie en el bosque, ni siquiera a un oso. El cuchillo ayudó, si era necesario, a cortar la presa en el mismo lugar, en el bosque, y llevársela a casa en partes.


    Una lanza, como un cuchillo, es un arma universal de caza militar. Un antiguo eslavo, armado con una lanza, podía matar sin ayuda a un oso grande. Las puntas de lanza son un hallazgo común para los arqueólogos, superadas en número después de las puntas de flecha.

    En las crónicas, la expresión “romper la lanza” es casi sinónimo de batalla. Piense en lo poderosos que eran los golpes de los caballeros rusos, rompiendo astas de lanzas de 3 cm de espesor sobre sus oponentes.

    Una lanza es un arma perforante de un guerrero ruso, centrada principalmente en la defensa (recuerde la "falange" grecorromana). Spear X-XI era algo más alta que su dueño. En el caso de las lanzas, la longitud habitual es de 1,8 a 2,2 m. El eje ("madera", "viruta", "oskepisch") se fabricaba con tipos de madera como abedul, roble, fresno y arce. Tenía entre 2,5 y 3,5 cm de diámetro y, a veces, el eje estaba sujeto con metal para que el enemigo no lo cortara. Encima se colocó una punta con un manguito (donde se insertó el eje). Las puntas alcanzaron medio metro de longitud. Hubo casos en los que se utilizaron "espadas" enteras en un palo, que no solo podían apuñalar, sino también cortar bastante bien. Las formas de las puntas eran variadas, pero aún predominaban las puntas triangulares alargadas. El grosor de la punta alcanzaba 1 cm y el ancho, hasta cinco cm. Ambos bordes cortantes estaban afilados. Se fabricaron puntas totalmente de acero y compuestas: se colocaron dos placas de hierro sobre una tira de acero en el centro; dicha punta resultó ser autoafilable.

    Los jinetes también usaban lanzas, pero no como los caballeros europeos medievales en los torneos. El ariete apareció en Rusia recién en el siglo XII debido a la armadura más pesada. Hasta el siglo XII, los jinetes golpeaban con una lanza de arriba a abajo, habiendo previamente balanceado la mano. En primer lugar, esta lanza se distinguía por su longitud (3-4 m) y su punta. Desde el siglo X se ha ido extendiendo una punta tetraédrica alargada.

    También había un tipo interesante de lanza con una longitud de punta de 30 cm y un peso de aproximadamente 1 kg. Y el diámetro interior del manguito es de unos 5 cm y la punta tiene forma de hoja de laurel. Su ancho es de hasta 6 cm y su grosor es de 1,5 cm. Esta formidable arma se llama lanza. Se conoce en Rusia desde la antigüedad, pero en los siglos VII-X perdió su relevancia, dando paso a otros tipos de armas. Recuerdo la lanza en el siglo XII, cuando, como ya se mencionó, hubo un aumento significativo en la armadura. Sólo un guerrero experimentado podría manejar bien una lanza. Podría perforar fácilmente la armadura de un caballero cruzado con él. Los cazadores se atrevían a cazar osos y jabalíes con lanzas.

    Posteriormente, en los siglos XV-XVI, aparece el búho, un híbrido de cuchillo y lanza. Era una hoja, afilada por un lado, con una característica forma de cuchillo en el mango de una lanza. La lechuza estaba “clavada” en el cuerpo de un guerrero ligeramente armado.

    Todos estos tipos de lanzas no están destinados a ser arrojados. Por supuesto, hay excepciones cuando, a toda costa, es necesario vengarse del enemigo en el fragor de la batalla. Para lanzar, se diseñaron lanzas ligeras especiales llamadas sulitsa (nuevamente, nadie prohibió apuñalarlas en casos excepcionales). La palabra "sulitsa" proviene del verbo "prometer", que originalmente significaba "lanzar". Podemos decir que una sulitsa es algo entre una lanza y una flecha. La longitud de su asta es de 1,2-1,5 m, debido a que las lanzas fueron arrojadas y la mayoría se perdieron después de la batalla, no estaban decoradas de la misma manera que las lanzas y las lanzas. Además, por razones de economía, las puntas no se hicieron en forma de encaje, sino con tallos, y se fijaron a un lado, se clavaron en el árbol con el extremo del pecíolo en forma de gancho y se enrollaron con hilo, cuerda, corteza de abedul o cuero. al eje. Los sulitsa eran de caza, con puntas más anchas, diseñados para crear una gran herida, pero no podían penetrar armaduras fuertes, y militares, por el contrario, con puntas estrechas y perforantes.


    Esta sección trata menos de armas letales y más de armas desmoralizadoras. Quien crea que las guerras antiguas se caracterizaban por un gran número de víctimas está profundamente equivocado. La tarea principal del ejército no era destruir completamente al enemigo, como muchos están tratando de hacer ahora, sino solo romper su resistencia, recaudar tributos, esclavizar a la gente y así garantizar la prosperidad de su pueblo. Hubo pocos muertos, mientras que más de las tres cuartas partes del ejército resultaron heridos (como lo confirman fuentes crónicas). Recuerde lo que decían del ejército victorioso: “venció a fulano de tal”. ¡No cortó, no cortó, solo latió! En tales batallas, los guerreros no se trituraban unos a otros como si fueran repollos, sino que simplemente los incapacitaban: los herían, los mutilaban y los aturdían. Las armas de este grupo son ideales para ello. A pesar de que no causa heridas sangrientas, puede aturdir al enemigo y romperle los huesos. Además, la armadura no salvó de un golpe hábil con un garrote o incluso un garrote: la cota de malla suave se hundió bajo los golpes de tales golpes, permitiendo que el arma infligiera un hematoma o fractura grave al enemigo. También era posible que la ola golpeara la cabeza mientras se llevaba un casco, aturdiera al enemigo o incluso rompiera el casco. Entonces esta arma era bastante funcional.

    Tanto el garrote como la maza evolucionaron a partir de un simple garrote. Sin embargo, su sencillez no le impidió ser un arma excelente. Las milicias y los rebeldes a menudo se armaban con garrotes. Incluso en el ejército de Emelyan Pugachev había personas armadas sólo con garrotes. A pesar de su apariencia primitiva, el garrote puede causar enormes daños al enemigo, incluso romper huesos, y si recordamos la enorme fuerza de nuestros antepasados, no hay duda de que el garrote en sus manos era un arma verdaderamente mortal. La misma palabra "club" indica el material del que fue hecho. La mejor maza proviene del roble (perdón por el juego de palabras) o, en el peor de los casos, del olmo o del abedul. Además, un garrote como arma no es sólo una especie de inconveniente. La parte trasera de esta especie de árbol es la más adecuada para un garrote, y el lugar donde el tronco se une a las raíces es la parte nudosa y más fuerte del árbol, que se usaba para golpear en la batalla. Por otro lado, el palo fue tallado para lograr cierta ligereza y facilidad de agarre en las manos. También existía la práctica de meter clavos en estos garrotes, lo que aumentaba aún más la capacidad de aplastamiento del garrote.

    Sin embargo, la línea entre un garrote y un garrote con maza es muy delgada: en la épica “La palabra heroica”:

    ...Y sus palos [kalik] son ​​de olmo,
    El plomo se vierte de punta a punta...

    Como regla general, se montó una maza con un garrote en un mango de madera, y los pomos de los más simples, como en esta epopeya, estaban hechos de cobre y se vertió plomo en su interior. Los garrotes más poderosos estaban hechos de hierro y acero. Las mazas y mazas de damasco también se mencionan en las epopeyas. También hay herramientas sólidas de fundición, es decir, con mango de hierro en lugar de madera. La diferencia fundamental entre una maza y una maza es el diseño del pomo. El garrote es ese arma con púas en forma de pera que estamos acostumbrados a ver en manos de los Bogatyrs; ya no tienen diferencias fundamentales. La maza tiene incluso una forma algo cúbica.

    La palabra maza significa "golpe", "perilla"

    Como ya se mencionó, la maza rusa antigua era, por regla general, una tapa de hierro o bronce, que pesaba entre 200 y 300 g, rellena de plomo, con un mango de madera de 50 a 60 cm de largo y 2 a 6 cm de espesor. A veces, para El enemigo no cortó la empuñadura del garrote, sino que estaba revestida con una lámina de cobre. La maza era utilizada principalmente por guerreros montados para asestar un golpe sorpresa en el casco o en el hombro. El club de los años X-XI se caracteriza por una forma cúbica con cuatro a seis púas piramidales. Este diseño sirvió de prototipo para la aparición en los siglos XII y XIII de las llamadas mazas de pinza, armas masivas Para los campesinos, el pomo era un cubo con una larga púa en forma de garra. Otra forma de maza, esta vez más complicada, es la maza de múltiples púas. Estaba hecho de tal manera que, sin importar cómo lo golpeara el guerrero, al menos una espina seguramente perforaría al enemigo. Estos dispositivos se fundían principalmente en bronce.

    Desde el siglo XIV, en Rusia se ha extendido el shestoper, una maza con seis hojas aserradas, ubicadas aproximadamente en el mismo lugar que las plumas de una flecha.

    Al igual que otras armas, la maza estaba decorada con un patrón intrincado: entre las púas, los antiguos artesanos crearon una escritura intrincada.

    El molde para las mazas se hizo así: primero el maestro tomó cera e hizo un muñeco de la futura arma con ella, luego la cera se cubrió con arcilla en la parte superior. Se calentó el molde de arcilla y salió cera. El formulario está listo.

    En Rusia había tanto mazas masivas simples como mazas doradas lujosas diseñadas específicamente para un guerrero noble.

    Al final te contamos un sello interesante. Muchos artistas (los mismos que pintan hachas enormes y pesadas) proporcionan a sus héroes épicos enormes garrotes totalmente metálicos.

    De hecho, como se mencionó anteriormente, el garrote pesaba solo entre 200 y 300 gramos, lo que era suficiente para un buen golpe. Los clubes de Stopudov son muchos de los verdaderos héroes, por ejemplo, Svyatogor:

    Como muy, muy lejos en poli puro,
    Aquí el humo se elevó
    Y allí el polvo se levantó en una columna,
    Resultó ser un buen tipo
    El poderoso ruso Svyatogor-Bogatyr.
    El caballo de Svyatogor es como una bestia feroz,
    Y el Bogatyr se sentó y se sentó en una trenza de brazas,
    Va al poli, se burla,
    Él lanza un garrote de damasco.
    Más alto que el bosque en pie,
    Debajo de la nube y el caminante,
    Este club se va volando
    Alto y en el cielo;
    Cuando el club cae,
    Lo recoge con una mano.


    El mayal era el arma del ladrón de la antigua Rusia. Una herramienta ideal para golpear a personas prácticamente imposibles de matar, y además fácil de transportar. En general, un mayal es una buena arma no sólo para un ladrón, sino también para un viajero, para ahuyentar a estos ladrones: "un mayal es del tamaño de un puño, y con él es bueno", dice el proverbio. A diferencia de la maza, esta arma es universal: puede golpear tanto al enemigo a pie como a caballo. Sin embargo, el mayal requiere que su propietario tenga gran habilidad para manejarse; de ​​lo contrario, será más frecuente que te golpees a ti mismo con el peso en la frente o en la espalda que al enemigo. El mayal también sirvió como arma para el guerrero. A veces se utilizaba la siguiente técnica: se ataban los mismos pesos a una cuerda y el guerrero, enrollando el extremo alrededor de su mano, lanzaba el peso al enemigo.

    El mayal es un peso en forma de pera que pesa entre 100 y 500 g, sujeto a una cadena o cinturón que, a su vez, está sujeto al mango. Se puede argumentar que el mayal es una invención puramente rusa, que fue utilizada por los eslavos en el siglo VI. La palabra "mayal" probablemente no proviene de la palabra "cepillo", de una palabra turca que suena igual, sino que significa "palo", "garrote", aunque puede haber debate sobre este tema.

    En el siglo X, los kistenems se utilizaban en toda Rusia. El peso estaba hecho de asta de alce muy duradera y pesada. Se perforó un agujero en una pieza de hueso en forma de pera, en el que se insertó una varilla de metal con un lazo, al que se unió una cadena o cinturón. Los mayales también estaban decorados como cualquier otra arma; en algunos de ellos se pueden ver signos principescos, patrones intrincados e incrustaciones de plata y oro. En el mismo siglo X, comenzaron a fabricar pesas de metal: pesas de hierro y bronce. La tecnología para su fabricación no difería de la producción de perillas para mazas.

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